Por primera vez, dentro de las instalaciones oficiales auspiciadas por Disney Company dentro del parque de diversiones Disneyland, en Anaheim California, se expenderán bebidas alcohólicas.
Si bien se permitía la venta de bebidas en ciertos restaurantes que rentaban espacios gastronómicos al interior del parque temático dedicado al imperio del entretenimiento de The Walt Disney, nunca se habían expendido licores, vinos o cervezas en instalaciones oficiales de la compañía.
Este espacio de venta de alcohol se instalará en una recreación de la cantina que aparece en la primera trilogía de la Saga de Star Wars -Episodios IV al VI-, se denominará Galaxy’s Edge y abrirá en el verano de 2019.
Just announced: #StarWars: Galaxy’s Edge will open in summer 2019 at @Disneyland Resort and in late fall 2019 at @WaltDisneyWorld Resort! https://t.co/1h3ksHls5S pic.twitter.com/PzLSbpwU1B
— Disney Parks (@DisneyParks) 23 de mayo de 2018
Se trata de una interesante estrategia que buscaría aumentar las visitas al parque y que representa un hito dentro sus reglamentos internos, toda vez que en el pasado establecían que las bebidas alcohólicas estaban dentro de “artículos no se permiten dentro del parque Disneyland, el parque Disney California Adventure o el centro Downtown Disney”, según su sitio oficial.
Y es que al mundo Disney se le ha asociado, con el paso de los años y décadas, con un estilo de vida saludable propio del ejemplo que se buscaría mostrar a los niños. Pero es el crecimiento de la empresa, junto con la expansión que representa la adquisición de marcas como Star Wars o The Avengers, lo que ofrece a esta firma la posibilidad de diversificar su oferta turística.
Según estimaciones de Statista, el parque temático Disneyland de Anaheim, California, registró una visita de 18.3 millones de visitantes, por encima de los 17.9 millones que recibió en 2016. Si se toma un registro de las publicaciones en Instagram en espacios turísticos, Disneyland también lidera a nivel mundial, con unas 14.62 millones de fotografías sólo en mayo de 2017, por encima de la Torre Eiffel de París, que sólo registró 7.25 millones de disparos de cámaras y otros dispositivos en el mismo periodo.