Días atrás se estrenó Spider-Man Homecoming y todo indica que será una de las películas más exitosas del verano. Las buenas noticias son para los fans del Universo Cinematográfico Marvel y para las cuentas bancarias de Sony Pictures.
De acuerdo con datos de Box Office Mojo, Spider-Man Homecoming tuvo ingresos por 257 millones de dólares durante el fin de semana de su estreno en 56 países. Estados Unidos y Canadá aportaron 117 millones USD mientras que en México se recaudaron 12 millones de dólares. Se espera que la cifra crezca aún más porque todavía falta el estreno en mercados como el de China y Japón.
Y el éxito inicial de la sexta cinta de la franquicia del Hombre Araña no es sorpresa porque el debut de Tom Holland como el superhéroes en Captain America Civil War generó grandes expectativas.
El gran ganador en esta historia es Sony Pictures porque Spider-Man es su carta más fuerte en este año, junto a Jumanji: Welcome to the Jungle y The Emoji Movie.
Desde 2002 Sony ha estado al frente de la franquicia de Spider-Man, cuyos derechos posee desde finales del siglo pasado cuando Marvel era una compañía en problemas económicos, algo que solucionó The Walt Disney Company al comprarla.
El año pasado Sony Pictures y Marvel Studios llegaron a un acuerdo para que el héroe arácnido apareciera en el Universo Cinematográfico Marvel, con la condición de que Sony haría sus propias películas y de las que obtendría todos los ingresos. ¿Qué ganó Marvel? El poder contar con Spider-Man en Civil War, Infinity War y otra cinta de los Avengers que aún no tiene título.
El éxito de Spider-Man Homecoming se debe a varios factores, primero, la gran campaña de marketing que, según datos de Dealdline, tuvo un costo de más de 140 millones de dólares, un récord para la franquicia, y una asociación con más de 30 marcas a nivel global.
El otro factor es que la película está directamente enlazada con el Universo Cinematográfico Marvel, que ha recaudado más de 4 mil 225 millones de dólares, y Sony, en lugar de tomar su propio camino un poco alejado de lo que pasa con los Avengers, como han hecho Netflix y ABC, decidió que su cinta tuviera la máxima relación posible con la serie de películas que arrancaron en 2008 con Iron Man.
