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Según el CEO de Uber, los robo-taxis que no requieran intervención alguna de conductores humanos todavía están a entre 10 y 15 años
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ATG, su unidad de conducción autónoma, fue valuada en más de siete mil mdd este 2020, tras recibir rondas de inversión de varias marcas
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Entre las tecnológicas que han puesto dinero en este proyecto tecnológico se encuentran la automotriz Toyota y Softbank Group
Parece que desarrollar vehículos que se manejen sin supervisión alguna es una misión muy compleja para que Uber la aborde sola. De acuerdo con Reuters, el CEO de la plataforma de taxis compartidos, Dara Khosrowshahi, ha dicho que está buscando aliados para trabajar en el desarrollo de conducción autónoma. La declaración vino después que le preguntaran si va a vender su unidad Advanced Technologies Group (ATG), que está especializada en ese sector.
Con esta nueva filosofía de negocio, Uber estaría incluso a trabajar con empresas que ahora la marca considera rivales en el mercado de la conducción autónoma. Asegura que, en todas las alianza a futuro, podría ofrecer a otras compañías una larga base de clientes para monetizar. Asimismo, podría proveer datos e información valiosa sobre las rutas que recorren los robo-taxis. Esto, con la intención expresa de identificar los viajes que en efecto sean más rentables.
Ya desde hace tiempo se había rumorado que Uber podría salir de la carrera por el desarrollo de la conducción autónoma. Esto, porque ATG es una de sus unidades más costosas, y no se espera que pueda proveer la tecnología necesaria para robo-taxis viables sino hasta dentro de unos años. Khosrowshahi no rechazó ni confirmó directamente la venta. Sin embargo, dijo que sí se están “explorando todas las opciones”, incluida una financiación interna y hasta externa.
La unión hace la fuerza en el desarrollo de robo-taxis
La creación de una plataforma de conducción autónoma viable ha probado ser muy complejo, y no solo para Uber. De acuerdo con The Verge, Hyundai y Aptiv piensan llevar robo-taxis de nivel cuatro a Las Vegas a través de su plataforma Motional. Se trata de una estrategia limitada y que no ha estado libre de críticas. Esto, porque los vehículos no tendrán un conductor detrás del volante y conducirán en vías públicas, lo que podría llevar a algún accidente a corto plazo.
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Más allá de la complejidad inherente de la tecnología, es interesante el enfoque que acaba de tomar Uber. Es muy similar al que ha estado ejecutando Volkswagen desde hace unos meses. A mediados del año, anunció la creación de una alianza abierta de automotrices para crear un sistema de robo-taxis estandarizado. En parte, el objetivo del proyecto es unir fuerzas y lidiar en conjunto con retos comunes. Pero también, se busca ponerse a la par del actual líder, Tesla.
¿Qué tan viable es la estrategia de Uber de ocupar un papel más secundario en el mercado de conducción autónoma? Podría parecer negativo a largo plazo para la marca pues rivales como Didi están invirtiendo fuerte en esas tecnologías. Pero también es prudente desde la visión de negocio, considerando las enormes pérdidas que ha registrado casi año con año, en datos de Statista. Una alianza le permitirá seguir dentro de este segmento, reduciendo costos totales.
¿Sale Uber derrotada de la conducción autónoma?
Varias empresas han reconocido que el desarrollo de robo-taxis no es tan sencillo como podría haber parecido en un inicio. Este mismo año, en junio, Mercedes-Benz y BMW terminaron un proyecto en este mercado. Igual que Uber, la decisión se tomó por razones exclusivamente de falta de recursos económicos. Si bien se dejó la puerta abierta para colaboraciones a futuro, no es del todo claro que se pueda tener una continuación de estos proyectos de investigación.
También cabe destacar que no es la primera vez que Uber aparentemente da marcha atrás en conducción autónoma. Ya desde marzo, Khosrowshahi no solo dijo que estaba abierto a crear alianzas con rivales en el desarrollo de robo-taxis. Incluso dijo que podría usar la tecnología que otros hubieran desarrollado en sus unidades. De esta forma, podría ahorrarse la inversión total en el desarrollo de estas iniciativas y al mismo tiempo obtener los beneficios para su app.