• De acuerdo con Statista, Huawei es la compañía más valiosa de todo el mundo en el sector de infraestructura tecnológica

• Expanded Ramblings señala que la empresa china provee servicios móviles a 500 millones de personas en el planeta

• Según la misma marca, trabaja en el desarrollo de tecnologías como Inteligencia Artificial, 5G y sistemas móviles

El entorno de la tecnología, particularmente en dispositivos móviles y smartphones, es cada vez más competido. Compañías como Samsung están desesperadas por presentar productos innovadores a los clientes, para reafirmar su cuota de mercado. Por su parte, otras empresas como Apple buscan reestructurar su cadena de suministro para ser más competitivas. Sin embargo, parece que no hay marca que luche contra más adversidades que Huawei.

A la larga lista de Huawei debe sumarse un nuevo enemigo: el sistema judicial de Estados Unidos (EEUU). De acuerdo con el Wall Street Journal, fiscales norteamericanos han iniciado un proceso contra la marca. Presuntamente la tecnológica china habría robado tecnología, propiedad intelectual y empleados de compañías e individuos rivales. Ni la empresa asiática ni el Departamento de Justicia del país han emitido declaración, según Reuters.

¿Una cacería injustificada contra Huawei?

Si bien se sabe que Huawei ha realizado acciones ilegales ante las autoridades de EEUU en el pasado, las nuevas acusaciones llegan en un momento interesante para la marca. Hace solo unas horas, Google anunció que bloqueará la llegada de su software a los Mate 30 de su rival. Asimismo, tanto Samsung como Apple ven con preocupación el crecimiento de la empresa china. Al final, no es secreto que la compañía tiene muchos y poderosos enemigos.

Por supuesto, su lenta conquista del mercado móvil no es lo único que motiva esta intensa lucha contra Huawei. CNBC recuerda que la compañía es instrumental en el desarrollo del 5G en China, un mercado que Mordor Intelligence estima que crecerá a 42.84 por ciento anual durante cinco años. Asimismo, como apunta CNN, es una aliada cercana de gobiernos que se oponen a la hegemonía de EEUU.

Determinar si la marca es responsable del robo de propiedad intelectual corresponde únicamente a las partes litigantes. Sin embargo, es imposible no observar el contexto político de Huawei. La empresa recién entró en modo de batalla y parece estar ganando los primeros encuentros. Además, el gobierno de EEUU ya ha mostrado su disposición a ayudar a sus propias compañías. Así pues, queda la duda, ¿será una cacería injustificada contra Huawei?