De acuerdo con Gartner (2020), el 87 % de los líderes empresariales sénior dice que la digitalización es una prioridad de la empresa, pero solo el 40 % ha llevado las iniciativas digitales a escala. Entonces ¿dónde está el problema? El problema está en que muchos líderes de negocios sénior no quieren entender que tarde o temprano, todas las empresas se enfrentarán a un disruptor digital, más aún si estamos en un entorno cada vez más digitalizado como resultado de la pandemia.
¿Qué hace que muchos líderes empresariales sénior no hayan implementado iniciativas digitales a escala? La respuesta a esta gran pregunta se encuentra en estos siete errores de los líderes sénior:
- No logran en sus equipos desarrollar competencias comerciales digitales distintivas sobre una lógica de trabajo en equipo multidisciplinario.
- Tienen un pensamiento de extrapolación lineal a partir de datos y experiencias del pasado. Por lo tanto, su visión de futuro se sustenta sobre la base de entornos no digitales, donde el modelo de producción lineal era dominante y los modelos de negocios basados en tecnologías digitales y en plataforma aún no existían.
- No han visualizado el cambio en las nuevas generaciones de consumidores y “conexumidores”, por consiguiente, son incapaces de brindar valor y experiencias al cliente de formas nuevas.
- No desarrollan el pensamiento divergente y la seguridad psicológica en sus trabajadores, este fenómeno termina impidiendo el florecimiento de la creatividad e innovación desde abajo hacia arriba en la compañía.
- Falta de audacia en la toma de decisiones, centrándose en cambios incrementales cuando el mercado experimenta y experimentará cambios cada vez más radicales.
- Inadecuada identificación de los problemas clave que deben resolverse, lo que les impide realizar una búsqueda efectiva de talento humano acorde a las exigencias de un proceso de transformación digital.
- Se enfocan en KPIs generales y tradicionales como ventas, EBITDA, costos totales, etc., en desmedro de KPIs más específicos y digitales como conversión SEO y SEM, tráfico web por producto, etc., que ayuden a ejecutar un seguimiento exhaustivo y así comprender las raíces de los resultados provenientes de las acciones digitales.
A modo de conclusión, la transformación digital comienza en la mente y corazón del líder, pues es este quien desarrolla esa visión transformadora en la cultura, que culmina por contagiar positivamente a los trabajadores y/o colaboradores de la organización.