El 27 de octubre Twitter dio a conocer que cerraba su aplicación de videos cortos Vine, debido a los malos resultados obtenidos en sus negocios del tercer trimestre, además la decisión se había tomado como una forma de sanear las finanzas.
Sin embargo, varios reportes de medios señalan que la red social está evaluando el cierre de Vine, debido a que hay varios compradores interesados.
De acuerdo con TechCrunch, Twitter recibió un gran número de ofertas luego del anuncio del cierre de Vine, incluyendo varias de Asia. La firma japonesa de mensajería LINE es uno de los mejor perfilados.
Una fuente cercana a las negociaciones, señaló que algunas de las ofertas son por menos de 10 millones de dólares, lo que indica que Twitter podría no generar ingresos significativos directamente de la venta de Vine.
De acuerdo con The New York Times, a Twitter le cuesta unos 10 millones mensuales mantener Vine. La cantidad sugerida por el diario para ser adquirida sería de menos de 30 millones de dólares, que Twitter pagó por Vine en 2012, cuando el servicio de video aún no se lanzaba y era independiente.
El reporte financiero
Twitter Inc. obtuvo ingresos por 616 millones de dólares, que representa un crecimiento del 9 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior, cerca de 545 millones llegaron por publicidad en la plataforma.
Además del cierre de Vine, Twitter anunció el despido de 9 por ciento de su fuerza laboral, una decisión que le hizo tocar uno de sus niveles más bajos en el mercado bursátil. La firma se ha estancado en el número de usuarios durante los últimos meses.
Vine se creó en 2012 y ese mismo año fue comprado por Twitter, quien apostó al contenido breve en video. Tras el anuncio del cierre, Rus Yusupov, uno de los fundadores de Vine reaccionó de forma curiosa en su cuenta de Twitter.
En su inicio Vine cobró popularidad y fue la app de mayor crecimiento en 2013, provocó la fama de algunos creadores de contenido, pero luego se vio superada por otras aplicaciones como Snapchat.