Aunque el e-commerce en México aún es un sector en desarrollo que le falta camino para consolidarse, es un hecho que no deja de crecer, se estima que para finales de 2017 tendrá un volumen de ventas por 8 mil 500 millones de dólares.
Esto refleja que en el país los usuarios se hacen cada vez más -a paso lento- nuevos hábitos de consumo entre los cuales se incluyen las compras a través de tiendas digitales o transacciones electrónicas.
Si bien, esta forma de comercio resulta atractiva, también es un hecho que tiene barreras por superar, una de ellas es generar mecanismos y dinámicas que sean fáciles de asimilar por los usuarios para que adopten cada vez más las compras online.
Actualmente, más del 50 por ciento de las personas que hacen compras online señalan realizar sus pagos a través de una tarjeta bancaria; 34,1 por ciento por una tarjeta de crédito y un 25,7 por ciento por medio de una de débito, revela el Estudio Perfil del Usuario Digital 2017.
Sin embargo, existen otras formas de pago que pueden fomentar el comercio electrónico, una de ellas que gana presencia es a través de PayPal, que ya es referida por el 24,1 por ciento de las 1,121 personas encuestadas por el Departamento de Investigación de Merca2.0.
Otras formas de pago que se comienzan a aparecer entre los hábitos de los usuarios son transferencias bancarias, a través de aplicaciones digitales y tarjetas de prepago.
Datos de esta índole son de relevancia para las marcas para conocer los hábitos de consumo de los usuarios en México, pues es un área de gran potencial para atraer nuevos clientes.
Cabe destar que, de acuerdo con datos de ComScore, el top de retailers en e-commerce en México es: Mercado Libre con 9.212.000 visitantes únicos; le sigue Liverpool con 1.8 millones de visitantes; y Walmart con una cifra 1.7 millones. Destacó que Amazon (que llegó en 2015) registró 1.2 millones de visitantes.