Después de reconocer que había consumido la sustancia que había ocasionado un resultado positivo en el control antidoping, la tenista Maria Sharapova ha comenzado a sufrir las consecuencias comerciales, y es que más allá de las deportivas, la rusa se había convertido en la tenista más mediática de la última década, gracias a lo cual ha acumulado una fortuna calculada en más de 90 millones de dólares.

La primera marca en pronunciarse fue Nike, que ha dejo a la tenista a la que patrocinaba desde los 11 años, rescindiendo el contrato que le reportaría hasta 70 millones de dólares.

Poco después se ha conocido que TAG Heuer, fabricante de relojes de lujo, con el que tenia relación desde hace 12 años, ha suspendido las negociaciones del contrato que le tocaba firmar, tras la finalización del último el pasado 31 de diciembre, con un comunicado que explicaba que ante la situación no lo renovarían.

Mientras que Porsche, ha decidido suspender hasta nuevo aviso, su patrocinio a la tenista con un comunicado en el que se podía leer: “Lamentamos las noticias sobre Maria. Hasta que no sepamos más detalles y seamos capaces de analizar la situación, suspendemos las actividades”.

Sharapova, que gracias a su talento deportivo, su belleza y su olfato para los negocios ha conseguido mucho más que otras tenistas a nivel económico, tiene también contratos con marcas como Head, Cole Haan, Evian, American Express, Avon y Supoergoop, de las cuales hasta ahora no se ha sabido nada, pero que no sería de extrañar que se sumen a las tres anteriores ante el reconocimiento del consumo de Meldonium, sustancia prohibida oficialmente desde el 1 de enero de 2016.

Según la revista Forbes, en 2015 percibió 29,7 millones de dólares y desde 2012 tenía su propia empresa Sugarpova, dedicada a la venta de golosinas en tiendas exclusivas y hoteles de más de 30 países.