Cuando los problemas de la cama o maritales se llevan fuera de su nicho, resultan en grandes batallas y todo el mundo se entera. Esto mismo está pasando con Shakira y Piqué, un matrimonio de celebridades que duró un poco más de 12 años y mucho contenido en redes sociales y programas de famoseo porque siempre eran el modelo de la pareja perfecta entre los famosos del mundo

¿Quién era más popular o quién contenía más capital de seguidores en su vida digital? Son dos pilares de popularidad con una trayectoria muy impresionante, una en el espectáculo y el entretenimiento, y el otro como figura de uno de los equipos más populares del planeta.

Si midiéramos su popularidad, su alcance y su audiencia, Shakira, sin duda saldría victoriosa. Muchos como yo, conocimos a Piqué porque estaba casado con Shakira y ella tiene un mercado mucho más amplio y con más alcance en todo el mundo, mientras Piqué está más delimitado, sólo al deporte y con algunas audiencias, sólo figura como la pareja de una de las cantantes latinas más importantes del mundo.

Piqué no vio contra quien se metió, Shakira apareció en uno de los comerciales más importantes y con más audiencia del planeta, el Super Bowl 2020, en compañía de Jennifer López. Juntas consolidaron su alcance y popularidad como las divas, vivas, más importantes del mundo anglo latino. Fue una sinergia de talentos, de capital social y de mercadotecnia personal.

La marca Piqué se pulverizó frente al monstruo de popularidad de Shakira

Como si no fuera suficiente, Shakira después de su controvertido divorcio por aparentes motivos de infidelidad de Piqué, lanzó, junto con el cantante urbano Ozuna, un contenido en Youtube que hace una crónica musical y cinematográfica que resume lo que significó la muerte de su matrimonio, la monotonía. Lo hizo como contando la trágica de la historia del final de su matrimonio ¿Es válido ventilar los problemas maritales en público? ¿Qué pasará cuando los hijos de ambos vean el video de Shakira victimizada por la infidelidad y la traición de Piqué? Estas preguntas dispararon a mi mente. Busqué a una experta en los espectáculos y encontré a Violeta Moreno, periodista con una solida carrera en el mundo del entretenimiento y le hice las mismas preguntas.

“Es válido. Shakira hizo catarsis de su tragedia familiar con la música y puso en voz de muchas mujeres lo que significa ser traicionada”, me contestó la reportera incansable de pasarelas y alfombras rojas de lanzamiento de películas y series.

Yo estoy en el punto medio, quizá sea válido lucrar con un rompimiento familiar para capitalizar y catapultar más aun tu fama y poner tu verdad en voz de lo que pasa con las mujeres postmodernas. Usar tu marca personal para destruir a tu expareja y terminar con su marca personal, siendo aplastada por la tuya. Todo es un reflejo de la era en la que vivimos. Como ya no alcanzamos a diferenciar entre la vida offline y online y las mezclamos y poco a poco nuestra identidad se va diluyendo entre relaciones paranormales que por un momento son dominio del mundo entero y que en realidad no nos corresponden.