George Orwell es el alias de Eric Artur Blair. Y en 1949 predijo que existiría una especie de régimen de estado que vigilaría a todos sus miembros de una forma omnipresente. Escribió su obra 1984, libro que cada día se parece más a lo que somos y muy probablemente en lo que nos convertiremos. Pues ese régimen ya existe, nosotros mismos somos nuestro control totalitario.
¿Qué tanto tenemos miedo a ser grabados en momentos incómodos o de nuestra intimidad?
Existen muchas fobias pero sin duda una de las más recientes es el temor a ser grabado por otra persona en un momento de intimidad o alguna situación incómoda. Esto puede ocurrir muy fácilmente porque ya los teléfonos inteligentes son capaces obtener contenido y transmitirlo o retransmitirlo para hacerlo viral de forma imparable.
Muchos de los miedos que debemos de agregar a nuestra sociedad actual, no es sólo que nos quiten nuestros bienes materiales, también que desprestigien nuestra marca personal o identidad pública que puede ser trasformada de por vida si es que somos grabados en situaciones incómodas o íntimas y este contenido se difunde para posicionar de forma negativa nuestra imagen.
La paz es guerra, la libertad es esclavitud y la ignorancia es fuerza
Sí, cada día nos parecemos más a las sociedades que describe George Orwell en su novela 1984. Los principales líderes mundiales son presos en momentos incomodos en donde son grabados y su imagen publica se describe a partir de ciertas escenas o “memes” que son difundidos en nuestra vida digital. Por ejemplo, mantenemos una imagen de Donald Trump
totalmente diferente a lo que en realidad es. Hemos creado un personaje de este mandatario de EE.UU que no corresponde con lo que en su realidad es. Todo esto a partir del contenido creado y grabado en diferentes situaciones o posiciones incómodas de Trump. Esto es más que divertido. Estamos de lleno en un mundo donde estamos siendo vigilados de forma omnipresente. Unos nos vigilamos a otros, y así con una eterna sucesión. Por lo mismo se cumple la premisa de Orwell: La libertad es la esclavitud. Somos y seremos presos de nuestras paranoias propias. Todo lo que hacemos podrá ser grabado por alguien más para ser usado en nutra contra.
Hoy más que nunca la guerra nos ayuda a mantener la paz. La guerra es un motor y promotor de la paz, como describió el discurso orwelliano. Y como lápida para todos estos eventos, la ignorancia se mantiene como fuerza incontenible. Tenemos acceso a tantos contenidos en nuestra vida digital que somos cada día y cada segundo más ignorantes y por lo mismo más fuertes por ser inofensivos para los controles de los estados. Entra más información existe seremos más ignorantes y así incapaces de pensar de forma unitaria, por lo mismo formaremos parte de la fuerza de todos que nos convierte en uno.
Así están las cosas pronto nos convertiremos en las paranoias de lo que más tememos.