Pareciera que tomarnos una “selfie” no representa ningún peligro; sin embargo, la realidad dicta que se trata de una actividad que ha causado diversas tragedias, motivo por el que, incluso, se invita a las personas a hacer un uso más adecuado y responsable de sus dispositivos móviles.
En estos tiempos donde las redes sociales siguen ganando popularidad y relevancia en el mercado, los smartphones son, de hecho, herramientas de trabajo más que esenciales, sobre todo si consideramos que, hoy en día, una de las profesiones más perseguidas por los jóvenes es la de Creador de Contenidos o Influencer.
De acuerdo con un estudio elaborado por Gartner, el uso de smartphones tuvo un crecimiento destacable, registrándose ventas de hasta 1.5 millones de unidades en 2021.
Por otro lado, los llamados “teléfonos inteligentes” también están acabando, poco a poco, con el mercado de las cámaras fotográficas. Información de la CIPA revela que los envíos de cámaras a nivel mundial cayeron hasta un 93 por ciento en un periodo entre 2010 y 2021, esto, como una consecuencia de la relevancia que han causado los smartphones.
Es así que, en la actualidad, los dispositivos móviles se van adaptando cada vez más a las exigencias del mercado, con modelos mucho más sofisticados, tecnológicamente hablando, y con funciones que concuerdan con el contexto en el que vivimos.
Selfie, ¿un peligro mortal?
Los tiempos de los dispositivos móviles o smartphones han traído consigo un hábito que, ahora, en un contexto en el que las redes sociales forman parte de las actividades más esenciales de las personas, no deja de llamar la atención: tomarse una “selfie”, una foto de sí mismo.
Si bien podría tratarse de un acto meramente inocente y que no representa ningún peligro, la realidad dicta que un estimado de 379 personas murieron entre enero de 2008 y julio de 2021 mientras se tomaban una “selfie”.
Así lo dio a conocer una investigación la fundación madrileña iO (especializada en medicina del viajero), la cual señala que la principal causa de dichas muertes son las caídas de lugares altos, ahogamientos y accidentes relacionados con distintos medios de transporte.
Tal como se muestra en la gráfica de arriba, de los 379 fallecimientos a causa de una “selfie”, un total de 216 fueron por caídas desde las alturas.
Ante tales acontecimientos, los cuales, incluso, podría ser más, se ha hecho un llamado a los usuarios de estos dispositivos para que hagan un uso mucho más responsable de sus smartphones y más especialmente a los influencers o creadores de contenidos, que son los que más utilizan estos dispositivos.