• Hasta ahora, la Ciudad y el Estado de México son las entidades que tienen el mayor número de infectados en todo el país

• Además, la capital es en donde se concentra la mayor cifra de víctimas por COVID-19

• Según el IMSS, diariamente han empezado a atender más de cinco mil consultas telefónicas sobre la pandemia

La COVID-19 ha probado ser todo un reto en términos de salud, por una simple razón: No hay un tratamiento ni vacuna comprobada disponible. Este hecho, junto a la alta tasa de infección de la enfermedad, significa que la única opción de los expertos médicos es tratar los síntomas y evitar que se compliquen. Por supuesto, esto ha desatado una búsqueda desenfrenada de fármacos que puedan ayudar a solucionar este desafío. Y México ya se uniría a esta carrera.

Durante su conferencia de prensa vespertina diaria sobre el estado de la COVID-19, se dijo que la Secretaría de Salud pronto podría empezar con ensayos clínicos de cinco fármacos. Estos medicamentos, una vez que obtengan el visto bueno de los comités de ética del país y de autoridades como Cofepris, empezaría a probarse su efectividad para luchar contra el virus. En específico, su capacidad para reducir, incluso evitar, los síntomas de los casos más graves.

Se espera que estos cinco ensayos clínicos comiencen en el transcurso de los próximos días. Tres de los fármacos ya tienen aprobación de las autoridades competentes para comenzar las pruebas. Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, afirmó que estos fármacos ya se usaron en otros países con relativo éxito. Sin embargo, sí enfatizó que aún no hay pruebas científicas contundentes en México que se puedan usar para combatir la COVID-19 de forma efectiva.

La importancia de los ensayos clínicos para COVID-19

En los últimos días, la Secretaría de Salud ha realizado grandes esfuerzos por limitar el efecto de la COVID-19 en México. El pasado 24 de marzo declaró la fase dos de la epidemia, en la que se contempla una serie de medidas de mitigación más agresivas para detener la infección. Hace tres días, el mismo López-Gatell pidió a la gente cooperar con estas recomendaciones para no afectar gravemente la actividad del país. Y ayer mismo, declaró emergencia sanitaria.

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¿Por qué es tan buena noticia que ya estén empezando ensayos clínicos para medicamentos para la COVID-19? Si bien algunos fármacos han tenido éxito en otros países para tratar la enfermedad, es crucial que las autoridades de México confirmen su seguridad y efectividad. De lo contrario, no se le puede dar permiso a las instituciones hospitalarias para recetarlos. En ese sentido, el inicio de estas investigaciones no pueden haber llegado en un mejor momento.

Hasta ahora, el número de nuevos casos de infección por COVID-19 en México, aunque en aumento, no han adquirido todavía la alta velocidad exponencial de otros países. Sin embargo, ya se han superado los mil 215 enfermos y se acercan a 30 muertes. En este sentido, ya se empieza a tener una necesidad urgente de fármacos para tratar los casos más graves. Y si se realizan las pruebas rápidamente, se podrían empezar a distribuir en cuestión de semanas.

Panorama mixto

Es fácil observar la situación en México de la COVID-19 y calificarla como desastrosa. Al final, ya empezaron a ocurrir limitaciones de envíos y se decretó el cierre de centros comerciales. Y a eso se le tiene que sumar que empresas desde Volaris hasta PepsiCo han tenido que prestar apoyo económico y logístico para resolver esta crisis sanitaria. A eso hay que sumar un par de casos de despidos, cuarentenas y hasta el cierre indefinido de múltiples negocios en el país.

Pero también hay que recordar que la situación de otros países es comparativamente peor. De acuerdo con USA Today, el número de víctimas por la COVID-19 en Estados Unidos ya superó la cifra de muertos del 9/11. Si bien las nuevas infecciones están desacelerando, Italia tiene cada vez más muertos diarios en sus unidades hospitalarias según The Local. Y en España, en datos de CNBC, se alcanzó hace unas horas la mayor tasa de fallecidos por la enfermedad.