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De acuerdo con Statista, la brecha de datos personales más grande de Facebook vulneró dos mil 200 millones de perfiles
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Según VPN Geeks, a ocho de 10 usuarios de redes sociales les preocupa que los negocios tengan acceso a su información
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En Estados Unidos, solo durante 2018, casi la mitad de las empresas sufrieron una filtración de datos
Todas las áreas de la publicidad están viviendo una revolución. En print, algunas compañías están trabajando en ambiciosos formatos innovadores. Tanto TV como radio están buscando flujos de dinero alternativos para sobrevivir el éxodo de anunciantes. Pero también el entorno digital está alcanzando un periodo de maduración. Uno que, tal vez, le podría hacer perder su principal ventaja competitiva: los datos personales.
Facebook presentó, según AdAge, un nuevo formato de anuncios. El sistema Special Ad Audience pretende distribuir comerciales de sus anunciantes sin utilizar datos personales. Así, en lugar de mostrar una publicación pagada a un usuario usando edad, género, código postal o datos similares, segmentaría a la audiencia a través de su comportamiento en línea. Esto podría desmotivar la hiper-segmentación del público en las campañas.
Publicidad digital sin datos personales
No es la primera vez que una marca cambia sus procesos por los miedos en datos personales. Facebook anunció una función “Clear History” en mayo que podría reducir la efectividad de las campañas de marketing. Google, a finales de junio, también empezó a permitir a los usuarios eliminar información sensible de sus dispositivos. Por su parte, Amazon empezó a eliminar grabaciones de sus servidores y a sobornar a los usuarios para ceder sus insights de uso.
Desde que se empezó a aplicar la norma de privacidad de datos europea, se temía que el panorama de la publicidad digital cambiara para siempre. De acuerdo con Marketing Week, varios agentes de la industria creen que el conflicto entre anuncios e información sensible podría destruir el mercado. Otros agentes, como Advanced Store y Media Trust, creen que solo es cuestión de adaptarse e, incluso, que podría jugar en beneficio de las empresas.
La protección de datos personales es prioridad para las personas. No asegurarles que su información está segura no solo abre la puerta a litigios legales. Reduce la confianza y, por lo tanto, la reputación de la marca y las tasas de conversión. Es crucial que los anunciantes se acostumbren a trabajar sin la hipersegmentación que antes prometía el entorno digital. O bien, buscar canales alternativos para seguirla utilizando sin vulnerar la privacidad del público.