Una vez que se ha hecho formal la suspensión de los trabajos de construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, el secretario de Turismo, Miguel Torruco, dio detalles acerca de la manera en que se distribuirán los vuelo desde y hacia la capital mexicana.

La base militar aérea de Santa Lucía, en el municipio de Tecámac, Estado de México, que será acondicionada para brindar servicios de transporte de pasajeros, será la terminal que reciba y garantice los despegues hacia el extranjero, mientras que las instalaciones del actual aeropuerto de la capital mexicana, en la alcaldía de Venustiano Carranza, servirá para dar servicio a los despegues y aterrizajes nacionales.

Para lograr este objetivo, agregó el funcionario federal, se buscará hacer más eficiente la conectividad en Santa Lucía. El proyecto incluye mantener la operación del actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez y también se buscará rehabilitar las instalaciones de terminal de Toluca.

Antes de asumir la presidencia de México, el equipo de trabajo de Andrés Manuel López Obrador realizó una consulta abierta para determinar si se continuaba la construcción de  la nueva terminal en Texcoco o se habilitaba la base de Santa Lucía. Los resultados arrojaron una clara preferencia por la cancelación de Texcoco

Ante ello, administración de López Obrador lanzó una oferta de recompra de bonos del NAIM por mil 800 millones de dólares, con la que busca evitar demandas internacionales por la cancelación del proyecto.