Mientras que el Gobierno de Venezuela gestiona la salida del Petro, la criptomoneda de ese país, el cual estaría sustentado en petróleo, oro, diamantes, gas y coltán; la oposición declaró este martes al dinero digital como nulo, ya que no se puede respaldar con un recurso que es propiedad de la nación, además de que resultaría anticonstitucional ya que éste no se puede promover sin el aval del Congreso.
Asimismo, indicó el diputado opositor, Jorge Millán, no se trata de una criptomoneda, sino de “poner en venta a futuro el petróleo venezolano”; de acuerdo con lo reportado por Reuters, el funcionario señaló que una vez que regrese la democracia al país sudamericano, no se garantizará ese activo, debido a que les leyes expresan que no se pueden comprometer.
Sin embargo, la postura oficial refiere que próximamente se pondrán en circulación alrededor de seis mil millones de dólares en Petros, los cuales serían subastados a 60 dólares por unidad, precio del barril de petróleo venezolano. Con esta criptomoneda, la administración de Maduro pretende solventar pagos a proveedores internacionales y locales, con la finalidad de evitar las dificultades que enfrenta en el sistema financiero global al momento de mover fondos para el pago de importaciones o deuda, así como para ser intercambiado por otras monedas virtuales, refiere la agencia informativa.
La resolución del Parlamento, de frenar a toda costa la salida del Petro, tiene como finalidad ser un obstáculo e incluso un fracaso del presidente Nicolás Maduro, en su último año del actual mandato, lo que podría reducir sus oportunidades de buscar una reelección. A su vez, para el Congreso, la creación de la Asamblea Constituyente, organismo que tiene más poder sobre Venezuela que el mismo Maduro, dificulta la declaratoria del Parlamento.
Es por ello, que este enfrentamiento, es un caso de marketing político en momentos decisivos para la política de Venezuela; en los próximos días podremos ver el desarrollo así como consecuencia de este tema.