La exposición LAAD 2017 (Feria Internacional de Defensa), que se llevó a cabo en Río de Janeiro del 4 al 7 de abril pasado, fue uno de los escenarios que Rusia eligió para mostrar su producto estrella. No es un vodka, sino un avión caza de última generación: el MiG 35.
El MiG 35 no es un avión cualquiera. Se trata de la quinta generación de los famosos caza. Se creó sobre la plataforma de los MiG-29K/KUB y MiG-29M/M2, mejorando su capacidad de combate y las características operativas. No son una nueva versión, sino aviones completamente nuevos.
Es capaz de portar hasta siete toneladas de municiones y de alcanzar velocidades superiores a 2.700 kilómetros por hora, su autonomía en misión de combate es de 1.000 kilómetros y el techo práctico de 17.500 metros.
MiG tiene una cartera de pedidos por valor de 4.000 millones de dólares.
“El nuevo avión de combate, que comenzará a ser producido en serie en 2019, fue exhibido po primera vez ante la prensa en enero pasado, en el aeródromo de Lujovitsi, a unos 140 kilómetros al sureste de Moscú”, publicó EFE. “Según la afamada casa MiG, su nuevo caza ligero ha sido concebido y adaptado para los mercados de una treintena de países, por lo que tiene gran potencial de exportación”, agregó la agencia.
United Aircraft Corporation marketing MiG-35 at LAAD 2017 military exhibition in Brazil pic.twitter.com/WNFU5tK9O7
— Derek Bisaccio (@DerekBisaccio) 6 de abril de 2017
El negocio de las armas
Rusia no es un jugador menor en el negocio internacional de armas. Según datos de Statista, ese país es el segundo exportador de armamento (datos de 2016), sólo superado por los Estados Unidos. El país gobernado por Vladimir Putin fue el año pasado el responsable del 23% de las exportaciones de armas en el mundo.
Del otro lado del negocio, los mayores importadores son India, Arabia Saudita, China, Emiratos Árabes Unidos, Australia, Turquía, Paquistán y Vietnam.