Los Ángeles, CA.- Un invento muy sencillo está causando muy buenas impresiones en el mercado norteamericano. Se trata de una cámara miniatura para bicicletas que hará el papel de “caja negra” en caso de algún accidente. Su nombre es Rideye y el proyecto está apoyado por Kickstarter.
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Lo que se quiere es dejar constancia de todo lo que pasa al rodar. Y eso significa tener evidencias. Su creador, Cedric Bosch, quien es ingeniero mecánico, se inspiró en el accidente de un amigo para crear un equipo que fuera capaz de impedir que los sujetos de accidentes viales que al momento del percance conducían sus bicicletas, se quedaran sin pruebas para procesar a los culpables.
Cedric comenzó este mes a comercializar el producto en una campaña de Kickstarter, una organización que da su apoyo a proyectos creativos, proveyéndoles los fondos necesarios para arrancar su negocio, en una alianza estratégica prometedora que premia la creatividad y el espíritu emprendedor.
Su estrategia de marketing ha sido tan buena que el noticiario ABC le dedicó unos minutos al aire para llevar a cabo un reportaje sobre el invento. El reportaje (en inglés) lo puedes ver aquí.
Sus características físicas son: carcasa de aluminio CNC para aeronática, resistente a los rayones, su tamaño es de 1″ x 1.5″ x 3″; su peso es de 185g.
Sus características de audio y video son: resolución HD de 1280 x 720, 30 FPS, 7 Mbps, codificación H.264; cámara gran angular de 120 grados; audio de 512 Kbps monoaural a 32kHz y 16 bits.
Sus características de hardware son: sensor “caja negra” de detección de accidentes; botón de un toque; dos pilas Panasonic de Ion-Litio de 6,800 mAh; memoria interna de 4 Gb (1.25 horas de video); y conector Mini-USB estándar con cable incluido.
En Youtube, ya se puede ver el promocional del dispostitivo:
El proyecto de la organización Kickstarter funciona de la siguiente manera: el fabricante ya tiene firmados contratos con socios y compañías que comercializarán el producto. El 100% de los fondos que la organización recaude serán utilizados la producción de Rideye. Sólo están esperando que se junte la cantidad mínima de equipos solicitados para arrancar.
Kickstarter apoya a otras marcas recién creadas para que empiecen a manufacturar y comercializar sus productos.