Para nadie es un secreto que la industria del cine se ha visto especialmente golpeada en medio de esta pandemia. Las medidas de confinamiento así como las restricciones una vez que comenzó el proceso de reapertura han puesto en jaque a los principales jugadores del sector.
Algunas cifras son contundentes al respecto. En México, los ingresos en taquilla bajaron de 18 mil 186 millones de pesos durante 2019 a 3 mil 584 millones durante este año, lo que se traduce en una caída de 80 por ciento.
Estas cifras fueron dadas a conocer por la Cámara Nacional de la Industria de Cinematográfica (Canacine), organismos que también indica que, hasta el 13 de diciembre pasado, se vendieron a penas 62 millones de boletos de cine, cifra evidentemente menor a los 335 millones alcanzados el año pasado.
Los retos de la industria
Lo cierto es que en medio de este escenario, existen un sin fin de oportunidades, mismas que ahora fueron discutidas en el webinar Los retos de la industria del cine a un año del Covid-19.
Durante esta charla Tábata Vilar, directora general de la Cámara Nacional de la Industria de Cinematográfica (Canacine), arrancó indicando que la industria atraviesa un momento complejo.
“Durante el periodo pandémico se tuvieron resultados aterradores, que nos enfrenta a un contexto complejo ahora mismo y a futuro”.
Con esto en mente, es importante comenzar a reconocer los riesgos actuales y que se mantendrán en los meses siguientes para la industria.
En principio se puso sobre la mesa el problema de desinformación que gira alrededor de la seguridad al asistir a una sala de cine.
De esta manera, Manuel Urrutia, vicepresidente senior global de estrategia de Cinépolis, destacó que “uno de los princoapels problemas que hemos tenido como industria es que hay mucha desinformación. Es muy difícil saber qué información es precisa. La industria ha sido golpeada por este fenómeno”.
En este sentido, uno de los grandes retos en los que ya se trabaja es en reforzar la seguridad que existe al asistir a una sala de cine en donde este aspecto está garantizado gracias a tres ejes básicos según el vocero de Cinépolis: Se respeta la sana distancia de manera eficaz ya que es fácil de controlar con la asignación de boletos venidos, la gente está en silencio y en reposo, al tiempo que la ventilación en los cines es eficiente.
Un buen aval
Esta premisa, fue reforzada por Fernando Évole, vicepresidente de la Federación de Empresas de cine en España (FECE), quien destacó que en la industria del cine, “la pandemia en España ha sido muy similar en México”, aunque el impacto ha sido un poco menor.
Indicó que aunque la reapertura fue muy lenta en España, al perder estrenos y lidiar con la desconfianza del consumidor para asistir al cine, hoy las cosas han cambiado.
“Hemos conseguid que los clientes com los colabores del sector sepan que nuestra oferta es una oferta segura. Las instituciones públicas de salud y gobierno han comunicado que se trata de una actividad segura a nivel mundial”.
Si bien este primer reto parece comienza a solucionarse gracias a este tipo de avales, Fernando indicó que el gran reto es la lidiar con la aparente falta de contenido para atender a los clientes que comienzan a llegar a las salas.
En este punto, destaca la participación de Francisco Eguren, director comercial y de programación de Grupo Cineme, quien aseguró que, en lo que se refiere al manejo de contenido “se menciona que no hay nada de estrenos” y aunque el vocero afirma que la cantidad de estrenos se redujo de 450 estrenos en 2019 a 223 debuts en pantalla grande, lo cierto es que “si hay contenido, si hay cosas que ver”.
Y es que las marcas han comenzado a ver más allá de las películas. El contenido alternativo (contenido no fílmico como conciertos, películas especiales, deportes, por ejemplo) se ha posicionado como una opción.
Lo cierto es que, como indica Francisco, uno de los retos en los siguientes meses será reforzar la promoción de estas nuevas propuestas.
Streaming ¿rival?
Este último punto es vital reforzarlo, más cuando mucho se ha hablado de la amenaza que el streaming representa para la supervivencia del cine.
Miguel Rivera, vicepresidente de programación global y contenido de Cinépolis, destacó que “el tema de las películas que se han ido a streaming ha generado mucha controversia y son casos tan sonados que nublan la conversación general sobre el estado real de la industria. Comienza a hablarse del fin de las salas y que partir de ahora el streaming es el futuro. La realidad es más compleja y menos sombría. Mucha de esta información no está atada a México”.
En este aspecto, se hablaron de cifras que ponen en perspectiva el fenómeno, en donde si bien, esperados títulos se fueron a streaming, el grueso de los estrenos están esperando el regreso del cine en 2021.
De acuerdo con lo compartido por Miguel Rivera, de los 25 grandes estrenos esperados para este año, 5 se estrenaron en cines, 3 se fueron a plataformas de streaming y 17 se pospusieron para el siguiente año.
“Si lo vemos de otra manera, el 90 por ciento de los grandes estrenos se mantendrán en cine para su estreno durante 2021. El modelo como existe hoy en día de ventanas, es uno que funciona. El poder exhibir estas películas es la mejor manera para monetizar estas enormes inversiones”, destacó Miguel.
Lo que viene para 2021
Las conclusiones de este webinar fueron claras y compartidas. El gran reto para la industria del cine en México es no perder su posición como un mercado en el que las ventas son elevadas.
Esto supondrá atacar el problema desde diferentes ópticas. En principio se deberá de seguir trabajando para demostrar que la asistencia al cine es segura, materia en la que ya las grandes marcas del sector trabajan.
Adicional es necesario impulsar la producción de contenidos locales para reducir la dependencia alrededor de títulos extranjeros.
Por último, es crucial comenzar a ver otro tipo de productos no necesariamente fílmicos que hagan crecer la experiencia de ir al cine que es, en realidad, lo que mantendrá en pie al sector.