• Una renuncia no siempre tiene un resultado negativo, ya que algunas personas se benefician al aceptar el abandono una empresa.
• El 87 por ciento de la población laboral que renuncia tienen un promedio de antigüedad de 1 año 5 meses.
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Hay muchos términos que se pueden utilizar cuando una persona deja su empleo, y es la naturaleza de su terminación lo que realmente los distingue. Siempre le corresponde a una empresa tener claro por qué un empleado debe quiere irse.
Existen diferentes procedimientos que se deben considerar para cada uno de ellos, y se desencadenan por diferentes medios, sobre todo para evitar el riesgo de un reclamo que pueda traer consigo demandas y otras cuestiones legales.
La renuncia no siempre tiene un resultado negativo, ya que algunas personas se benefician al aceptar otro tipo de situaciones ligadas al proceso de abandonar una empresa. Una de las más grandes diferencias está en la naturaleza que tienen los colaboradores al momento de elegir su dirección laboral. Sobre todo, la comunicación es la clave, la cual es especialmente relevante para una situación estresante, como un proceso de renuncia.
Generalmente, tiende a ocurrir, entre otras situaciones, cuando un rol se vuelve obsoleto, el negocio se reestructura o cuando está fallando su modelo comercial. De cualquier forma, una compañía ya no puede permitirse el lujo de conservar a esa persona después de amagar con su salida.
Antes de que comience ese proceso, se tiene que consultar sobre algunas posibles razones. Es decir, por qué está sucediendo, cuántos se verán afectados, cuáles son las opciones y de qué manera se respaldará. Ser lo más transparente posible y comunicarse constantemente es la mejora manera de afrontarlo.
Cuando se cuenta con empleados motivados correctamente, siempre existirá en ellos una buena actitud para lo que hacen y el sentido de pertenencia a la empresa será más grande.
Una parte clave de un proceso de renuncia es considerar las alternativas adecuadas dentro del negocio, para no generar problemas en cuanto a las funciones. De acuerdo con el estudio de Clima Laboral, el 87 por ciento de la población laboral que renuncia tienen un promedio de antigüedad de 1 año 5 meses.
Jane Crosby, socia de la firma de abogados Hart Brown , describe el proceso que se puede seguir para manejar la situación.
Si bien el sueldo es muy importante, también existe la ganancia emocional, que se mejora con el reconocimiento de la labor realizada por cada uno de ellos en sus respectivas áreas.
Selección
Los empleadores necesitan identificar el grupo que pueda fomentar la renuncia. Generalmente recae en aquellos que realizan trabajos similares, o los que trabajan en niveles similares. Se deben adoptar criterios de selección objetivos para no terminar con un grupo amplio que decida irse de una compañía.
Reuniones de consulta
Consultar con los empleados y llevar a cabo reuniones con el personal es una forma de mantener comunicación con el grupo de trabajo, especialmente si hay una cantidad numerosa de empleados.
Compensación
Los ejercicios de renuncia deben planificarse cuidadosamente y son un factor importante para determinar el clima laboral que hay dentro de una empresa. Los empleadores que no siguen un proceso justo corren el riesgo de tener reclamos y esto puede ser financieramente costoso para una empresa.