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Un análisis de nextMedia.Hamburg revela que solo el 5% de los consumidores cree más en los influencers que la publicidad clásica.
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El 61% de los especialistas en marketing considera difícil encontrar influencers relevantes para una campaña, según un estudio de Mediakix.
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En México se estima que hay 443 mil 030 influencers activos, lo que lo convierte en el tercer país latinoamericano con mayores estrategias de influencer marketing.
En una era casi por completo digital, cientos de empresas han optado por implementar una de las estrategias más populares del social media: el influencer marketing. Y auque este método publicitario ha demostrado ser efectivo frente a las nuevas generaciones, no está excento de “errores” que ponen en riesgo la reputación de una marca y muestran los problemas de credibilidad en la influencia humana. Así lo demuestra una reseña viral de TikTok que, lejos de impulsar las ventas de un producto de L’Oréal, causó debate y decepción entre cientos de usuarios.
Y es que los influencers se han convertido en una voz extendida de las marcas, colaboradores que conectan más fácilmente con los consumidores más jóvenes y que, gracias a su visión más fresca y experiencias, logran dar ventaja a la publicidad convencional; sin embargo, no todo es como lo pintan, pues, a dos años del gran auge de esta estrategia mercadológica, hoy el 83.5 por ciento de las personas ya no observa ninguna diferencia entre los anuncios patrocinados con influencers y la publicidad física o audiovisual… todo se resume a la credibilidad.
La tendencia en crecimiento se basa en las reseñas y si estas no tienen un principio de expertise en las personas que recomiendan un producto o servicio, las personas se darán cuenta, haciendo que tanto el influencer como la marca pierdan potenciales clientes y seguidores.
De hecho, el último estudio internacional de nextMedia.Hamburg reveló que el 34.1 por ciento de los consumidores apuntan a la credibilidad y autenticidad como el principal factor de reconocimiento en una campaña de influencer marketing, mientras que el 25.8 por ciento considera que aún falta mucho camino para que los creadores de contenido hagan uso responsable de la enorme plataforma comercial que tienen en sus manos.
El tema toma relevancia en nuestra industria si contemplamos que México es el país con más mega-influencers de la región latina, en la cual convergen cerca de 12 millones 044 mil 815 jóvenes generando viral, orgánico o comercial.
Reseña de L’Oréal desata debate sobre la credibilidad de los influencers
Mikalya Nogueira es una famosa influencer dedicada al estilo de vida, la moda y la belleza; sin embargo, una sola colaboración para L’Oréal hizo que su credibilidad se pusiera en duda entre sus más de 14.4 millones de seguidores, sin mencionar el daño que generó a la marca y al rímel de pestañas que se supone que tendría que probar.
Y es que la gurú de la imagen personal fue duramente criticada por mentir en la reseña de TikTok donde, momentáneamente, se aprecia la leyenda “L’Oréal Paris Partner”. La maquilladora estadounidense se había construido una imagen prolífera entre los usuarios de redes sociales por generar reseñas honestas y en directo, con los procesos completos de cada prueba de producto.
Ahora, tras publicar un video para la máscara de pestañas lavable Telescopic Lift, esta imagen se rompió, pues Nogueira inicia mostrando un ojo con el producto puesto y otro sin nada, algo que resulta extraño…
“Esto parece pestañas postizas, ¿cómo, qué?”, dice ella supuestamente asombrada al poner una capa de rímel en el ojo limpio.
No obstante, cuando la maquillista intenta poner una segunda “capa de máscara”, los usuarios notaron que había un corte en el video y, acto después, la mujer aparecía con pestañas notoriamente diferentes y dramáticas.
@mikaylanogueira THESE ARE THE LASHES OF MY DREAMS!! @lorealparisusa never lets me down ? #TelescopicLift #LorealParisPartner #LorealParis @zoehonsinger ♬ original sound – Mikayla Nogueira
Esta pequeña acción hizo que los seguidores de la influencer de belleza cuestionaran publicidad engañosa y hasta la efectividad del producto, espetando que Mikalya usaba pestañas postizas para crecer su engagement, además de que algtunos incluso dudaron que se tratara de un anuncio oficial de L’Oréal, pues TikTok requiere que el contenido de la marca se indique claramente con el #Ad en pie de nota, lo que Nogueira no hizo.
“Yo tambien amo mis ardell wispies (pestañas postizas)”, maya kennedy
“Bueno, no compraré el rímel, pero agregué ardell wispies al carrito”, Aimee Swift156
“¿Es esto un anuncio? No veo la divulgación, solo una pequeña etiqueta de “socio de L’Oreal” al principio que desaparece rápidamente, así que no estoy seguro”, Joe (Bambi)
“¿Por qué los influencers ya no son honestos? ¿Como cuándo paso esto? Antes podíamos confiar en las reseñas y ahora no podemos confiar en una sola”, Anna Ramos
“L’Oréal y Mikayla acaban con toda confianza en los ‘influencers’ con este anuncio”, steven gen
Este ejemplo sólo muestra el gran desafío que tienen ahora las empresas a la hora de buscar personas influenciadoras para que sus comentarios y valoraciones personales sobre los productos respondan a su propia experiencia como consumidor y no a una publicidad misma frente a la audiencia.
El objetivo no es fácil, pues esta particularidad poco se cumple y cada vez más se generan prácticas engañosas que ponen en la mira la protección de la leal competencia y la protección del consumidor, sobre todo cuando el influencer contratado realiza publicaciones poco claras o tiene actitudes de antivalores que ejerzan una mala imagen al púiblico y se llega a asociar con las marcas con las quecolabora.
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