Internacional.- El modo en el que la publicidad trata la belleza o la moda no pasa desapercibido al consumidor y, de hecho, podría llegar a producirle cierta “fatiga”, según se deriva de un estudio elaborado por Havas Worldwide. El documento, entonces, explora el impacto de las nuevas tecnologías en la percepción que el consumidor posee de sí mismo y las implicaciones que esto tiene para las marcas del sector de la belleza, moda y salud.
El informe, que ha sido efectuado en base a una encuesta a 10.000 hombres y mujeres en 28 países, destaca que para el 69% de los entrevistados el mundo sería un lugar más feliz si la gente no estuviera obsesionada con la belleza física. No en vano, el 73% considera que es preocupante que la belleza tenga más valor que lo que hay en “el corazón y en la mente de cada uno”.
Además, según informa el portal Campaign, el 79% de los individuos cree que el uso que hacen las compañías de Photoshop para conseguir que las celebridades luzcan más delgadas y “perfectas” está “dañando a la sociedad”.
Del estudio, por tanto, se desprende el desacuerdo que impera en las nuevas generaciones de consumidores hacia las representaciones no realistas del cuerpo en los anuncios publicitarios. Una tendencia que marcas como Dove han aprovechado para conectar con aquellos clientes que no se sienten identificados con lo que la mayoría de los anunciantes del sector propone y que apuestan más por promover “la belleza real”.