Samsung presentó su reloj inteligente o smartwatch, el Galaxy Gear. Básicamente, es una pequeña computadora con una pantalla táctil de aprox. 4 cm con una resolución de 320 x 320 pixeles, una cámara integrada y bocina. Ciertamente, el hombre nunca ha tenido tal poder de cómputo en la muñeca, si bien desde la aparición del iPod Nano de Apple y su adaptación como reloj, se esperaba que el smartwatch fuera una variación de este prodigio tecnológico.
Ciertamente la filtración del iWatch de Apple vino a acelerar las cosas en la firma coreana, pues la presentación se realizó con al menos una semana de anticipación del siguiente evento público de Apple y al estilo de la firma de Cupertino, se presentó hoy pero se empezará a vender un tiempo razonable después. De igual forma, se le dio un precio psicológico de $ 299 Dólares, el cual parece exagerado para la mayoría de los analistas. Aunque el consumidor entusiasta tenderá a percibirlo como $ 200 por el sabido efecto de marcar el precio con un digito final de 9.
Para el analista Nick Bilton del NY Times, el dispositivo de Samsung, es una apuesta a que los jóvenes regresen a portar reloj. Una vez que como hace notar este artículo no es común entre los jóvenes universitarios. En un sondeo rápido entre mis alumnos, encontré que la tendencia en México no es tan marcada pero si afirman que el reloj es más un accesorio de vestir que un instrumento. Así, quienes no usan reloj, se enteran de la hora en el celular o en la computadora.
Una desventaja de este Galaxy Gear es que fue concebido como una extensión del celular (obviamente, Samsung; aunque se promete que sea compatible con dispositivos con Android). Pese a contar con una bocina, no puede reproducir música por si mismo aún con una generosa memoria de 4GB. Pero, cuenta con una cámara en el extensible con resolución de 720p capaz de grabar vídeo.
Si bien, cuenta con un micrófono, el reloj como tal no es capaz de realizar llamadas, simplemente mediante un enlace Bluetooth, es capaz de funcionar como terminal del celular y una vez enlazada la llamada es posible hablar a través del reloj. Es posible instalar aplicaciones en el reloj y también será posible hackearlo.
Tal vez el primer reloj inteligente surgió en los setentas, con el reloj de LED marca Pulsar, cuyos diseñadores confesaban que se habían inspirado en la joya cinematográfica 2001: Odisea del Espacio de Stanley Kubrik. Sin embargo, hasta que el reloj digital fue capaz de tomar decisiones (es decir sonar una alarma programable) podríamos decir que tuvo inteligencia. Aun hoy día estamos lejos de las funciones de los relojes del célebre James Bond, que están bien documentadas en el blog Watchismo
La llegada del Galaxy Gear, abre el camino y las expectativas para el iWatch, sin embargo podría ser que la concepción de Apple sea más como un reloj que como una extensión del teléfono celular que da la hora, ya que la mayoría de sus dispositivos centran una función y alrededor se establecen los valores agregados.
Sin duda, estos dispositivos nos mantendrán aún más conectados y nos acercan a un estado permanente de conexión 24×7 que habrá que estudiar y analizar para conocer el efecto en nuestras vidas. ¡No te desconectes!
Fotografía
Video de la presentación del Galaxy Gear
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