El ministro británico para el Brexit, David Davies, afirmó este miércoles que el Reino Unido no pagará 100 mil millones de euros para abandonar la comunidad.
“Queremos las (cifras) legales, no los deseos de la Comisión (Europea)”, dijo en una entrevista a la televisora local ITV el ministro del gobierno británico a cargo de las negociaciones para salirse del bloque de naciones, además de que no están dispuestos a pagar dicha cifra que ha sido publicada en la prensa.
Cuando le preguntaron si Reino Unido pagaría 100 mil millones de euros el ministro respondió: “No vamos a pagar 100 mil millones de euros”.
La prensa británica informó que la factura del Brexit, es decir las cuentas pendientes por pagar, tendrían un costo de entre 60 mil y 100 mil millones de euros.
Por su parte, el negociador de la Unión Europea para el Brexit, Michel Barnier, indicó que es “una ilusión” pensar que la salida del Reino Unido será rápida y sin dolor, pero por el momento, el funcionario europeo se negó a dar una cifra aproximada del costo del Brexit.
“No hay una cifra porque hay varias estimaciones. Primero tenemos que saldar las cuentas pasadas y hasta que no nos sentemos a definir la metodología no podemos dar una cifra exacta”, refirió.
Barnier dijo que “no hay una factura del Brexit, ni tampoco es un castigo”, sino que se trata de pagar los compromisos financieros adquiridos con la UE como cualquier otro de los países miembros.
En la primera fase de las negociaciones los países tendrán que acordar un método para calcular las obligaciones financieras de Gran Bretaña, aseguró Barnier, quien hace una semana asistió a una cena con la primera ministra británica, Theresa May, en esta ciudad.
¿Qué dificultades presenta el Brexit?
Las negociaciones aún no comienzan, pero la postura de Bruselas es que la salida será complicada, llena de tecnicismos, y que ya se encuentran “contrarreloj” para iniciar el proceso de ruptura.
La Unión Europea busca transparencia en las negociaciones, mientras que May le apuesta a la confidencialidad.
Los vacíos en la información han sido llenados con especulaciones de la prensa británica sobre la factura que el Reino Unido deberá pagar antes de salirse del bloque de naciones en marzo de 2019, fecha límite de dos años estipulada en el artículo 50 del Tratado de Lisboa.
Barnier confía que las negociaciones mostrarán sus primeros signos de progreso “este otoño” mientras que el Reino Unido cree que logrará un acuerdo antes de la fecha límite de 2019.
Para la Comisión Europea, es una prioridad garantizar que los ciudadanos europeos que llevan cinco años en Reino Unido pueden quedarse, mientras que Gran Bretaña no se ha pronunciado al respecto, dejando en el limbo la situación legal de unos tres millones de residentes europeñ
La estrategia de 12 puntos que dio a conocer May en enero pasado incluyen la salida definitiva del mercado común, retomar control de las fronteras y de la inmigración, defender los derechos de los británicos en la UE y renegociar un acuerdo comercial con el bloque de naciones.