Gran Bretaña prohibirá la venta de nuevos vehículos a gasolina y diésel a partir de 2040 como parte de un plan para sacarlos de los caminos 10 años después. Lo confirmó este miércoles por la mañana el ministro de Medio Ambiente de ese país, Michael Gove.
El anuncio llega a menos de un mes de que el gobierno francés diera a conocer un plan similar y de que varias ciudades alemanas, entre ellas Stuttgart y Munich, hablaran que considerar la prohibición para vehículos diésel.
A comienzos de julio, como lo adelantáramos en Merca2.0, Volvo anunció que sólo lanzará modelos eléctricos o híbridos desde 2019.
El gobierno británico ha estado bajo presión para tomar medidas para reducir la contaminación del aire después de perder varios casos legales. Asimismo, en mayo pasado, presentó propuestas para un plan de desguace para deshacerse de los vehículos más contaminantes.
El tema fue centro de la campaña que eligió a Theresa May en junio. Los conservadores se comprometieron a hacer que “casi todos los carros y pickups” tengan emisiones cero para 2050. “Estamos confirmando que no debería haber nuevos vehículos diesel o de gasolina para 2040”, dijo Gove a BBC Radio.
Gove también dijo que el gobierno pondrá 260 millones de dólares a disposición de las autoridades comunales para los planes de restricción del acceso de vehículos diésel a las carreteras más contaminadas. Una estrategia que considera más viable que “prohibiciones directas de acceso a los centros de las ciudades o costosos esquemas de desguace de vehículos”, publicó Reuters.
New diesel and petrol cars are to be banned from 2040 as part of a new strategy to tackle air pollution https://t.co/Bmj3JSq6BN pic.twitter.com/MEjFNoqO9R
— BBC News (UK) (@BBCNews) 26 de julio de 2017
El diésel se muere
La demanda de automóviles diésel cae en casi todo el mundo. En la primera mitad de 2017, bajó un 10 por ciento la venta en Gran Bretaña, mientras que la de vehículos de gasolina subieron un 5 por ciento, según datos de los concesionarios.
En contrapartida, la venta de modelos eléctricos e híbridos aumentaron casi un 30 por ciento en el mismo período. Pero un detalle: aún representan menos del 5 por ciento de las matriculaciones de automóviles nuevos.