Por donde se vea, el espacio temporal que ocupa la escuela representa para la creatividad la oportunidad de exponerse a formas publicitarias que se acercan al arte, a las vanguardias, a diseños atrevidos, y elementos que por doquier denotan estimulación y creatividad de la juventud
La escuela representa un espacio de formación creativa fundado en los principios del conocimiento, en la metodología y el camino de la profesionalización, a los cuales se les brindan las herramientas que les permiten enfrentarse a los retos creativos que la actividad exige.
Una escuela de diseño o de marketing aborda de muchas maneras los tópicos relacionados con los productos de publicidad, pero la riqueza de la academia debe apuntar a la ambición de explorar muchas otras formas de generar ideas.
La educación profesional en el campo del marketiing y la creatividad propicia el desarrollo la manera de trabajar en el verdadero ejercicio de trabajo, desarrollar una metodología a partir de esquemas creativos y sofisticados, trabajar a modo de laboratorio de innovación.
Si bien las calificaciones son fundamentales en la formación académica, se debe poner atención a la selección de asignaturas, el desarrollo de trabajo en equipo y otro tipo de evaluaciones. En suma, lo importante es desarrollar modelo de pedagogía activa mediante el cual la responsabilidad de aprendizaje recae en el alumno.
Venimos de una cultura del conocimiento en la que que desde las primeras experiencias escolares nos obligaban a conocer y acumular datos. Se hace necsario pasar a una cultura del entendimiento que nos permita comprender la complejidad del mundo que nos rodea y descifrarla para promover soluciones innovadoras a los problemas contemporáneos y trasladar esas soluciones al territorio de la comunicación.
Promover un pensamiento conceptual, un pensamiento estratégico y un pensamiento digital son parte de los retos que se pueden enfrentar en este regreso a clases.
Los objetivos multidisciplinarios, en los que tanto el alumnado como el profesorado aportan valor y experiencias enriquecedoras no sólo para los estudiantes, sino para la planta docente también, se expresan y desarrollan mejor cuando hay una capacidad de sinergia y de horizontalidad en los roles de trabajo.
La lluvia de ideas y la transmisión de experiencias complementa un proceso de aprendizaje en este regreso a clases, lo que permite reivindicar el derecho al error… equivocarse representa también una parte esencial para entender los procesos creativos con claridad y potenciar la creatividad de los alumnos y también de los profesores.