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Red Bull te da alas es uno de los slogans más recordados, pero también un ejemplo de lo que no debe hacer una marca.
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Fue Benjamin Careathers, quien era un consumidor asiduo de la bebida, la persona que dio inicio a las demandas a la compañía por publicidad falsa.
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Las características por las que te pueden rechazar de un empleo, pero que al final te beneficiarían
Seguramente recuerdas los comerciales de la marca de bebidas engergetizanes, Red Bull. Con el slogan “Red Bull te da alas” la marca se dio a conocer en el mundo y estos productos llegaron para quedarse.
Sabemos que el slogan es el lema o título que precede a ciertas obras, el mote que se pone en los emblemas para hacerlos más comprensibles o la proposición de un discurso. En marketing es como un grito de guerra, una llamada a la acción.
Encontrar uno que funcione a la perfección con la marca y los consumidores es complejo, pero existen casos exitosos como “Recuérdame”, de Gansito Marinela, o el propio de Red Bull: “Red Bull te da alas”.
Fue tan atractivo de la mano de su campaña que lo utilizaron en cada plaza que cubren. Su efectividad llegó a tal nivel que algunos consumidores se lo tomaron literal y creyeron que el producto les daría alas, al menos eso alegaron ante las autoridades para que se les indemnizara por publicidad engañosa.
En Estados Unidos tuvieron que desembolsar millones por acusaciones de este tipo. Hace cinco años la empresa pagó 13 millones de dólares por publicidad engañosa, a cada uno de los demandantes le dieron 10 dólares en efectivo o un vale por dos productos de Red Bull por un valor de hasta 15 dólares.
Fue Benjamin Careathers, quien era un consumidor asiduo de la bebida, la persona que dio inicio a las demandas a la compañía por publicidad falsa, durante agosto del año 2014. Su argumento fue que después de 10 años consumiendo Red Bull, no tenía alas ni rendimiento atlético o intelectual mejorado.
Más dinero
Ahora lo harán en Canadá, ya que la publicidad engañosa es penada por la Ley de Protección al Consumidor de Quebec. Quieren frenar más problemas legales y Red Bull GMbH (la matriz de la marca en Austria) pagará 850 mil dólares canadienses, de acuerdo con Dished Vancouver.
Los canadienses pueden reclamar su parte, siempre que demuestren que compraron una lata de Red Bull entre el 1 de enero de 2007 y el 23 de junio de 2019, reclamarán que los spots los engañaron y si solicitud es válida en la web destinada a ese fin, les tocará una parte de la cifra mencionada.
Desde un vocero de marketing de la marca dijeron que: “el marketing de Red Bull siempre ha sido ingenioso, veraz y preciso”.
Aunque en Canadá la situación no le saldrá tan costosa, la firma enfrenta un reto derivado de una mala práctica básica en mercadotecnia, si bien es importante que un slogan “pegue”, lo es mucho más prever conflictos legales que desencadenen una crisis mucho más profunda.