¿Nadie interactúa con tu contenido publicado en redes sociales?, no te preocupes, no eres el único que experimenta eso. De hecho, no hay duda de que cada vez es más difícil el lograr un buen engagement orgánico con la comunidad de una marca o negocio, números reportados por Invesp señalan que, con respecto al número total de seguidores de una cuenta de marca o empresa, las tasas de interacción para redes sociales como Instagram, Facebook o Twitter, apenas llegan al 4.21, 0.07 y 0.03 por ciento respectivamente.

Los números son significativamente bajos, y lo peor de todo es que pueden empeorar. Esto puede ser por dos causas principales, la primera siendo por ajustes que hagan las plataformas, como es el caso de Facebook, dando prioridad a las publicaciones de sus usuarios antes que a las de las páginas; la segunda porque una marca se auto-sabotea con sus acciones. En ninguno de los casos la comunidad tiene la culpa, de hecho ellos parecen dispuestos a interactuar, Sprout Social indica que hasta 30 por ciento de los miembros de la generación millennial interactua con una marca al menos 1 vez al mes.

¿Sabes cuáles son esas acciones que ejecutan las marcas?, de acuerdo con Kissmetrics, existen 4 principales por las que nadie interactúa en la cuenta de una marca o empresa, estas son:

• No les das lo que quieren

Por repetitivo que pueda parecer, es necesario recalcar la importancia que tiene el proveer a las personas con lo que quieren, no solo en cuanto a productos, también en contenido. Tal como hemos mencionado en otras ocasiones, ahora el consumidor es quien decide que es lo que quiere recibir, no lo que la marca quiera darles. Por poner un ejemplo, el último Sprout Social Index, de 2017, destaca que los usuarios de redes sociales esperan que las marcas brinden honestidad, amistad, ayuda y diversión, en términos de comportamiento. En este sentido, acciones como el social listening, son más que necesarias.

• No consideras la evolución demográfica

El no comprender la salida y llegada de nuevas generaciones, así como sus características o cambios en comportamientos, puede poner en desventaja a tu estrategia. Por ejemplo, aunque tu público objetivo sean los millennials, es posible que de pronto otra generación como la “X” se fije en tu marca y tu no estés enterado por centrarte completamente en los millennials, o puede que de pronto los baby boomers se vuelvan la mayor comunidad en determinada red social y estés dejando pasar una oportunidad importante. Tu estrategia siempre debe considerar un espacio para nuevos agentes que no tengas contemplados.

• No empleas videos

Si bien cada estrategia de contenido es diferente y obedece a las necesidades de la comunidad de la marca u organización. Es importante considerar los formatos que son tendencia. En este caso, el video es uno de los que más destaca en la actualidad gracias a los buenos resultados que aporta, por ejemplo, en el caso de Facebook, Social Media Today refiere que estos obtienen 135 por ciento más alcance, además se trata de una de esas cosas que también la audiencia quiere, la misma información de la fuente indica que 43 pro ciento de los consumidores quieren ver más contenido en video por parte de las marcas.

• No gestionas tu reputación

El no afrontar las crisis de forma adecuada cuando se presentan, puede provocar daños en la credibilidad con el paso del tiempo, mismos que harán que las personas pierdan el interés en la marca u organización. Todo detalle, por más diminuto que pueda parecerte como marca, tiene un impacto en la percepción.