Gracias al crecimiento que ha tenido, llegando a los mil millones de usuarios activos mensuales en este 2018, Instagram se está posicionando como un espacio clave para las marcas y empresas, tal como en su momento ocurrió con Facebook.
El crecimiento de la red social representa una carrera importante para las marcas que buscan resultados, una que los puede llevara considerar el “tomar atajos” para consolidar su presencia en esta red social, no obstante, esos atajos pueden ser una mala idea, particularmente el comprar seguidores puede ser uno de los más graves. Aquí te compartimos cuáles son las principales razones por las que no deberías hacerlo:
- No hay engagement
En muchas ocasiones, los seguidores comprados ni siquiera son personas reales, se trata de bots que si bien pueden generar interacciones básicas para tu cuenta, no están aportando un engagement real que pueda impulsar a una marca o a un influencer.
- La cuenta luce cuestionable
Siguiendo lo mencionado en el punto anterior, debes saber que existe cierto margen o tasa de engagement para las cuentas en Instagram dependiendo de la cantidad de seguidores con las que cuentan, por ejemplo, se sabe que las cuentas que tienen alrededor de 10 mil seguidores cuentan con un engagement promedio del 4 por ciento. Aunque se trata de un promedio, cuando las cuentas sobrepasan ese número por un margen amplio es posible identificar que algo anda mal es sospechoso.
- Puedes saturarte de comentarios no deseados
S las cuentas falsas que adquieres son bots, es posible que en tus publicaciones aparezcan muchos comentarios genéricos, que incluso pueden estar en otro idioma. El problema es que esto dificulta saber si se trata de mensajes genuinos. Además, la marca se arriesga a recibir comentarios completamente inadecuados para determinada publicación.
- Instagram reconoce y elimina cuentas falsas
En su esfuerzo por mejorar la experiencia de los usuarios en la plataforma, Instagram se da a la tarea de identificar y eliminar cuentas que son falsas, cosa que representa una perdida de recursos para la marca al decidir invertir en este tipo de perfiles.
- Es una violación a las políticas de la red social
La compra de seguidores es una práctica no aceptada por la plataforma y las consecuencias, posteriores a una primera advertencia sobre la sospecha de acciones deshonestas, pueden terminar en la suspensión de la cuenta.
- Acaban con la credibilidad de la marca
Cuando los miembros reales de la comunidad que estás formando o los usuarios de la plataforma sospechan que la cuenta tiene algo inusual empezará a haber cuestionamientos, no solo acerca del uso de redes sociales, también acerca de si hacer negocios con la marca vale la pena o este tipo de prácticas deshonestas también se encuentran en otras partes del negocio.
- No se generan ingresos
Por último, debido a que en muchas ocasiones se trata de cuentas falsas, es probable que los resultados o el cumplimiento de objetivos nunca se logren pues no se trata de personas que tienen un interés real en la marca y en lo que vende.