Santiago, Chile.- Cada día son más las personas que dicen aburrirse de Facebook y del resto de las redes sociales. Algunos cierran sus cuentas y luego se arrepienten, volviendo a ellas con más fanatismo que antes. Sin embargo hay otros, como los que fueron entrevistados para una nota reciente en El Mercurio de Santiago, que se niegan a volver a ellas y aunque confiesan tener algunas diferencias con sus amigos y su entorno en general, por el abandono, también están cada vez más seguros de su decisión. ¿Las principales razones? Te invitamos a seguir leyendo.
Más notas asociadas:
4 pasos para salir de una crisis de marca en redes sociales.
Katy Perry impacta en redes sociales en el medio tiempo del Super Bowl
¿Tienes el tipo de personalidad que molesta en redes sociales?
Privacidad. Muchas personas se niegan a “ventilar su vida” en redes sociales y probablemente por no saber cómo mantener sus asuntos personales fuera de las redes, se niegan a seguir en ellas. El tema tiene que ver con el manejo, pero la decisión es válida. Por otro lado, el Whatsapp sigue siendo una buena herramienta para la comunicación y parece ser menos pública que las redes.
Descontrol emocional. Varios de los testimonios aparecidos en la citada entrevista tienen relación con un cierto descontrol emocional. La posibilidad de ver a los ex y a sus actuales parejas o la rabia que les genera alguna opinión a la que rebaten sin control, genera conflictos en las personas. Por lo mismo, evitar pertenecer a un clan social virtual los mantiene a salvo de ese descontrol. El Whatsapp, si no se forma parte de un grupo, tiende a ser algo mucho más directo y privado, un tema entre dos personas que se comunican lo mejor que pueden por escrito.
Pérdida de tiempo. Para la mayoría de la gente, es inevitable pasar mucho tiempo interactuando en redes sociales y algunos usuarios han descubierto que ya no quieren entregar parte de su vida a las redes. El Whatsapp, en cambio, acompaña y se puede realizar casi cualquier actividad de la mano de los mensajes verdes.
Pérdida de vida real. Vinculado con lo anterior, la facilidad con que nos comunicamos a través de redes sociales a veces da la impresión de que, por lo mismo, las redes son la única forma verdadera de mantener los lazos, entonces se comienza a perder la motivación para traspasar el umbral de la vida virtual y retomar la vida real. Aquí no hay diferencia, sucede lo mismo con Whatsapp.