Twin Peaks es una serie de 1990 -transmitida por la ABC y producida por Lynch/Frost Productions– que es un referente en las personas que trabajan en áreas relacionadas con mercadotecnia, publicidad y comunicación -esto sin olvidar a los miles de fas en todo el mundo- y, seguramente ya vieron el ‘extraño’ teaser o, más bien, un promo en el que aparece David Lynch comiendo una simple dona.
La serie, que aunque no todo mundo vio pero hoy es considerada de culto, es un thriller psicológico que aborda el asesinato de una estudiante ocurrido en un pequeño y extraño pueblo de Washington. Tendrá un reboot en 2017 y desde hace un par de años ShowTime y el propio Lynch realizan algunas acciones de marketing digital con la finalidad de posicionar en el top of mind de las audiencias la nueva entrega.
El ‘extraño’ promo en el que vemos a Lynch comiendo una simple dona durante casi 20 segundos no dice mucho, pero en un día desde su publicación ya acumula más de 281 mil views en YouTube.
La nostalgia es algo que el cine y televisión ha capitalizado con creces produciendo una enorme cantidad de remakes, reboots y spin-off de películas, series de televisión y hasta series animadas que fueron exitosos en el pasado y que hoy generan un gran engagement con las audiencias.
Twin Peaks tuvo su impacto en una generación, cómo mencionamos al inicio de esta nota, muchos de ellos hoy trabajan en áreas relacionadas con la publicidad, mercadotecnia y comunicación. A esto hay que agregarle que Lynch es considerado uno de los directores estadounidenses de culto más reconocidos en los últimos 30 años (Mullholand Drive, The Elephant Man y Blue Velvet).
Actualmente se vive una especie de nostalgia de series, algunos canales de televisión de paga empiezan a apostar por revivir producciones que tuvieron éxito en años anteriores. Fox recientemente estrenó “The X files” con nuevos capítulos y mismos protagonistas, mientras que CBS trabaja en MacGyver. También se rumoran secuelas de “Prison Break” (2005-2009) y Netflix tiene actualmente dos series que, si bien o fueron de culto, sí cuentan con una audiencia que creció a la par de las series como Gilmore Girls y Fuller House.