En octubre de 2014, Converse demandó a 32 marcas por violar sus derechos al copiar descaradamente el diseño de sus emblemático modelo Chuck Taylor, y tras un acuerdo con una de las implicadas, Ralph Lauren, ahora ésta deberá destruir todo el calzado que se le parezca.

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Entre las empresas demandadas por Converse, propiedad de Nike, se encuentran Sketchers, Walmart, K-Mart, FILA, Ed Hardy y Ralph Lauren; esta última ahora con la misión de destruir 36 modelos cuyo estilo semeja el de los Converse Chuck Taylor, tras el acuerdo legal con el que se dará por zanjado este caso, según reporta la publicación Women’s Wear Daily.

Además, Ralph Lauren se compromete a deshacerse durante el próximo mes, no sólo de la producción de estos 36 modelos, sino de todo el material, herramientas y moldes que se ha utilizado para su elaboración, así como del embalaje y todo el material promocional sobre los mismos que aun exista.

En el acuerdo también se establece que Ralph Lauren deberá pagar una cifra no especificada por la empresa, a Converse, que se encuentra en campaña para poner fin a tomas las imitaciones de sus famosos zapatos.

Para probar que los derechos de diseño de una marca han sido infringidos, se debe lograr que los consumidores asocien un diseño especifico con una marca especifica, algo que en el mundo de la moda no es sencillo, pero que el caso de Converse ha sido claramente demostrado con los resultados ya reseñados.