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78 por ciento de la gente confía en el producto de una empresa que genera su contenido
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Hoy en día, el marketing cumple con varios roles para las marcas. Para algunas empresas, puede ser una forma de diferenciar su portafolio del que ofrecen sus competidores. Otras compañías podrían emplear estas estrategias para impulsar sus objetivos de responsabilidad social. Algunas marcas más simplemente solo quieren incrementar el ruido alrededor de su organización. Pero su función más común es la de promocionar algún producto o servicio.
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Aunque parece un objetivo bastante sencillo, no siempre es fácil promocionar un producto. De acuerdo con Mail Relay, para algunas empresas resulta imposible hallar la mejor forma de explicar exactamente qué es lo que ofrecen al público. Por su parte, Chief Marketer señala que más de una campaña no puede conectar y motivar a los usuarios a realizar una compra. Según DIY Marketers, hay tres estrategias básicas que ayudan a resolver muchos de estos retos:
Publicidad pagada para promover un producto
Ésta es probablemente la forma más común de dar a conocer el portafolio de ofertas de una marca. Implica simplemente que las compañías paguen por los servicios de otra empresa, especializada en llamar la atención del público consumidor, para redirigirlos a su negocio. Así, las empresas pueden solo pagar porque su producto aparezca en redes sociales, canales de comunicación masivos, etcétera. Todo eso, sin preocuparse demasiado por todos los detalles.
De inicio, podría parecer una de las estrategias de promoción de un producto más caras que hay. En especial cuando se consideran canales más premium, como TV o activaciones Out-Of-Home (OOH). Sin embargo, también libera el tiempo del equipo de publicidad y ventas de las empresas, que pueden enfocarse en otras actividades más importantes. En este sentido, aunque el precio explícito puede parecer alto, suelen tener un alto Retorno de Inversión (ROI).
Content marketing
Otra estrategia que se ha vuelto muy popular con el paso de los últimos años. Al contrario de la publicidad pagada, esta técnica busca promocionar un producto o servicio a través de un efecto orgánico. Es decir, llamar la atención del público no porque se les estén presentando mensajes en espacios premium, sino porque se les atrae con materiales de interés. En este sentido, su éxito está en que se creen piezas diseñadas para cada paso del ciclo de compra.
Es decir, una marca que quiera utilizar esta estrategia de marketing debe estar consciente que debe de tener un contenido para cuando la persona apenas se entere de la marca. Asimismo, necesita materiales para cuando considere adquirir algún producto, otros para el momento que decida concretar la compra y más para fidelizar al cliente en cuestión. En este sentido, puede que sea de las técnicas que más esfuerzo y trabajo requieren de parte de las marcas.
Promocionar un producto directamente
Tanto la publicidad pagada como el content marketing ayudan a las marcas a cerrar la brecha que hay entre ellas y el público. Esto es necesario cuando, en el transcurso de las actividades de negocio normales, no hay oportunidad de una interacción cara a cara. Pero, hay empresas que se esfuerzan mucho para encontrar momentos de interactuar de forma directa con sus clientes. Y es que esta estrategia es la mejor forma de dar a conocer un producto o servicio.
Hay varias formas de sacar el mayor provecho posible a este tipo de estrategias. Por ejemplo, el email, los eventos offline y los grupos de Facebook son canales muy informales y efectivos para estar en contacto con los clientes. Asimismo, se puede reforzar el efecto de estos canales a través de promociones, sistemas de referencia, seminarios y otras activaciones similares. La clave está en la difusión boca a boca de la marca, la más efectiva y provechosa que existe.