Uno de los parámetros más utilizados dentro de la planificación en marketing es el nivel socioeconómico, índice que, conformado por siete niveles, clasifica a las audiencias en función de su capacidad para satisfacer las necesidades de los integrantes de los hogares en cuanto a términos de vida, salud, energía, tecnología, prevención y desarrollo intelectual. Gracias este ordenamiento del mercado, se ha determinado que la clase media es la que dicta las principales tendencias en el consumo.
Esta es una de las razones por las que jugadores como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), presta especial atención a los movimientos dentro de dichos estrictos sociales, y recientemente ha publicado un informe que alerta sobre la disminución de la clase en media en México y sus impactos en el caminar económico del país.
Ingresos para llegar a la clase media
De acuerdo con el informe “Bajo presión: la reducción de la clase media”, la OCDE informa que en promedio 61 por ciento de la población en el organismo internacional se encuentra en este grupo de ingreso, mientras que en el caso de México la cifra llega al 45 por ciento.
En buena medida, esto responde a que para las generaciones más jóvenes resulta cada vez más complicado alcanzar los ingresos necesarios para llegar a la clase media, estricto definido por la OCDE como las personas que reciben ingresos de entre 75 por ciento y 200 por ciento del ingreso nacional mediano.
La pregunta a responder es ¿cuánto se debe ganar en México para pertenecer a la clase media? Según la metodología de la institución, en México los ingresos medios mensuales de un hogar de dos personas alcanzan los 7 mil 128 pesos, por lo que si tiene ingresos entre 5 mil 346 y 14 mil 256 pesos, pertenece a la clase media.
Cuando se alcanzan ingresos iguales o mayores a los 14 mil 357 pesos, se considera que esa persona está dentro de la clase alta del país, a la que sólo pertenecen el 19 por ciento de la población.
Millennials con mayores dificultades
En este sentido, el reporte de la OCDE indica que a diferencia de las generaciones anteriores, los millennials tienen dificultades particulares para alcanzar la clase media en el país.
Algunas cifras son claves al respecto. Mientras que casi 70 por ciento de los nacidos en la generación de la posguerra (Baby Boomers) formaban parte la clase media cuando tenían 20 años a nivel mundial, esta cifra se redujo a 64 por ciento para la Generación X (1965-1982) y sólo 60 por ciento para los millennials.
En el caso de México, el 48 por ciento de los Baby Boomers formaba parte de la clase media cuanto tenían 20 años, 46 por ciento de la Generación X y 47 por ciento en el caso de los millennials.
Las cifras indican que aunque en cantidad, los millennials son un grupo más extenso, su fortaleza económica no es tan sólida si se compara con otras generaciones, hecho que para las marcas representa una oportunidad en su tarea de conquistar nuevos públicos meta.
Los baby boomers será un mercado que tomará relevancia todavía mayor relevancia en el futuro próximo, por lo que aquellas marcas que desde ahora enfoquen esfuerzos en esta generación lograrán construir ventajas competitivas a largo plazo, al construir bases de consumidores que más leales y con un poder adquisitivo mayor les permitirá ganar posiciones en un entorno que crece en competencia.