• Deportes y eventos deportivos podrán celebrarse, a puerta cerrada, a partir de esa fecha

• El gobierno de Querétaro señaló que eventos masivos, cines, teatros y bares aún no se reincorporarán a la economía

• Junto a estas medidas, el gobernador dijo que habrá un paquete de 250 millones de pesos para estimular al estado

Prácticamente en todo el mundo el tema de la nueva normalidad ha sido uno de los que más se han discutido por autoridades, empresas y público en general. Ya no queda duda que la economía de prácticamente todo el planeta no puede quedarse mucho tiempo más en pausa. Sin embargo, con la pandemia en su peor momento, no cabe duda que el costo puede ser muy elevado. Así que cada región está realizando sus apuestas de acuerdo a sus prioridades.

Todo este contexto es importante por las noticias que da a conocer Milenio. El gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, acaba de anunciar que su estado tendrá una apertura de su economía la próxima semana. Según el funcionario, múltiples actividades no-esenciales van a poder reanudarse a partir del próximo 17 de junio. Asimismo, apuntó que se espera que para esa fecha el semáforo de la situación epidémica en la región, ahora en rojo, pase a naranja.

De los negocios que van a poder reanudar sus operaciones en la economía de Querétaro se encuentran hoteles, restaurantes, estéticas, parques, mercados y centros deportivos. Ninguno de estos recintos podrán operar al 100 por ciento de su capacidad, para poder reducir algún posible impacto de la pandemia. Cabe resaltar que el gobernador Domínguez se adelantó a la decisión. Esto, porque el Gobierno federal prometió informar sobre estos cambios los viernes.

¿Querétaro prioriza su salud o su economía?

A lo largo de las últimas semanas, la discusión sobre el regreso a las actividades productivas en México se ha vuelto un tema muy sensible. Como lo demostraron las compañías del sector automotriz, la reticencia a reanudar la economía podría afectar las cadenas de producción en la región. Pero al mismo tiempo, en datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ahora es América Latina el nuevo epicentro de la pandemia. Y según el gobierno, el fin aún está lejos.

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Se podría pensar que la decisión de Querétaro es precipitada. Al final de cuentas, no parece que México esté cerca de pasar el pico de infecciones. Y como hay cada vez más gente en las calles, todo indica que el número de casos continuará disparándose día con día. Pero a la vez, se tiene que reconocer que la economía nacional no tiene la fortaleza para continuar estática mucho tiempo. Ya muchos están en una posición muy vulnerable, y la recuperación será lenta.

Más que calificar de acertada o equivocada la decisión, o pensar que a Querétaro le importa más su economía que la salud del público, se debe reconocer la naturaleza del movimiento. Es una simple apuesta, confiando que las medidas de contención serán suficientes para que no se rebase al sistema de salud y a la vez pueda reanudarse la producción local. En algún punto u otro, todos los estados del país tendrán que hacer lo mismo. Y para ganar deben prepararse.

El constante riesgo de salud

Obviamente los ojos del mundo están pendientes de los costos que la pandemia le ha pasado a la economía. Sin embargo, no hay que olvidar que hay una importante factura médica. Hay algunos estimados que indican que para el cuatro de agosto podrían ser hasta 75 mil muertos en México. En países como Corea del Sur, se están identificando rebrotes a pesar de todas las medidas de precaución. Aún así, hay ciudades donde hay esperanza de erradicar la COVID-19.

Por desgracia, es evidente que no solo México está en riesgo de pagar un costo médico muy alto por la reapertura de la economía. Según el Tampa Bay Times, el número de casos dentro de Florida está llegando a cifras récord, en medio del regreso a las actividades. Según CNBC, en India están empezando a descontrolarse las infecciones, superando a países con una curva epidémica más avanzada. Aún así, como apunta el NYTimes, hasta la política vuelve a la calle.