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Se estima que alrededor de seis de cada 10 mexicanos no tiene ahorros para emergencias
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La mayoría de estas personas, ante la falta de presupuesto, le pediría a un familiar o amigo en lugar de a un banco
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Una cuarta parte de estas personas cree que no tienen este “guardadito” porque no se les da este hábito
No hay duda que en todo México, desde empresas hasta individuos, están luchando por pasar de la mejor manera la crisis de la COVID-19. A pesar de que hay un presupuesto asignado al rescate de pequeños negocios, podría no ser suficiente para salvar a todas las empresas. Por ello, muchos expertos esperan que millones de compañías se vayan a la quiebra en este año. Y por consiguiente, que un número más grande de empleados se quede sin un trabajo formal.
En este sentido, lo mejor que pueden hacer las personas es tomar precauciones para reducir sus gastos y optimizar sus recursos por si la crisis financiera se pone peor. De acuerdo con Investopedia, la gente debe prepararse para recortar sus gastos recurrentes. Y en datos del New York Times, también es importante tener la mente fría y estar calmado. Pero Fintonic cree que también ayuda mucho optimizar el presupuesto para la despensa, con estos consejos:
Planificar y hacer una lista para el presupuesto
Lo primero es saber por adelantado qué es lo que se quiere comer en la semana y anotarlo. De esta forma, se puede comprar solo lo que se necesita para alimentarse con el transcurso de los días. Y por consiguiente, también se reduce el desperdicio de comida o la compra de gula.
Comparar marcas
También es muy importante fijarse en precios y diferencias entre productos para maximizar el presupuesto. Hay empresas que ofrecen menos alimento por mayor precio, y a veces conviene comprar presentaciones más grandes de comida no perecedera para ahorrar algo de dinero.
Optimizar el presupuesto con productos locales
Por lo general, es mucho más caro adquirir bienes de marcas que no son del país o la región. Esto, porque tienen costos asociados al empaquetamiento y el transporte. Es más barato ir a un mercado local y adquirir alimentos que vengan de la zona y que aparte estén en temporada.
Aprovechar las ofertas
Hay muchas marcas que ofrecen descuentos que podrían beneficiar al presupuesto. Pero lo más importante es solo hacerles caso si corresponden a algo que está en la lista de despensa. Si no es así, entonces se convierten en un gasto no contemplado y no muy útil a corto plazo.
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Granel para reducir presupuesto
Semillas y legumbres se pueden adquirir a granel en varios locales. De esta forma no solo se pueden evitar empaques, que terminan por generar un impacto en el medio ambiente. A la vez se puede obtener la misma (o más) cantidad de comida por un precio bastante más reducido.
Apostar por reservas
Estos ahorros en el presupuesto rápidamente pueden significar que sobra un poco de dinero en cada ida a la tienda. Los pesos adicionales podrían dedicarse a comprar alimentos fuera de la lista que no se echen a perder tan rápido para crear una pequeña reserva de emergencia.
No eliminar los gustos del presupuesto
Es muy importante recordar que, aún si se está ahorrando para el futuro, también es frustrante no poder darse una “recompensa” ocasional. No es necesario eliminar por completo cosas como la comida a domicilio, solo limitarlas a algo ocasional para no arriesgar las finanzas.
Vigilar el ecommerce
En México, el comercio electrónico apenas se está consolidando. Por eso, algunas marcas ofrecen sus mismos productos en estos canales a un precio preferencial, lo que beneficia el presupuesto. Por otro lado, puede ser más económico que manejar o gastar en transporte.
Organizar y controlar para optimizar el el presupuesto
Una vez que se hayan comprado las cosas, es importante tenerlas guardadas en la alacena, despensa, refrigerador o donde sea de forma que se pueda revisar de forma rápida. De esta forma, no solo es más fácil ver qué hace falta. También se evita repetir algunas compras.
Crear buenos hábitos
La clave de un buen presupuesto es aprender a seguir estas prácticas de ahorro de forma continua. Así no solo se pueden obtener resultados de forma consistente. Además, es mucho más fácil darle un seguimiento sin que parezca, en el largo plazo, una obligación o una carga.