Una entrevista para un puesto de trabajo siempre es el filtro definitivo para determinar si un profesional tendrá posibilidades de ganar o perder el empleo, ya que en dicho proceso, aunque parezca elemental la pregunta-respuesta, en realidad se juegan factores como la “primera impresión”, así como los conocimientos generales. Según LinkedIn, el 87 por ciento de las áreas de Recursos Humanos de las empresas llaman a candidatos a entrevista, solo si son de “alta calidad”.
Según un análisis de Money, los reclutadores tienen por costumbre clasificar a sus candidatos según su comportamiento durante entrevista, ya que frases tontas, nerviosismo o arrogancia suelen ser motivo suficiente para que RH demore en sus respuestas, aunque éstas sean negativas.
De acuerdo con CNBC, una de las preguntas más recurrentes en una entrevista laboral es “¿Por qué quieres este trabajo?”, a lo que una respuesta estándar podría arruinar las posibilidades de causar una buena impresión, es decir, una respuesta común sepultará tu lugar en la lista de opciones, es como un grado B o un B-Plus en el mejor de los casos.
Lo correcto será responder algo como “quiero trabajar en la compañía porque valora el aprendizaje continuo. Su enfoque centrado en el cliente lo distingue en la industria”, o bien, “creo que su cultura de innovación, en productos y procesos lo hace único”.
Asimismo, debes asegurarte de mencionar cómo tus habilidades podrían ayudar a los objetivos de la compañía. Algo como “creo que seré de gran ayuda para lograr la misión de avanzar en el área”. Acto seguido, deberás entrar en detalles explicando cómo ayudaría a la compañía a lograr su visión, como “el trabajo de gerente requiere de alguien que pueda llevar el marketing y las operaciones a la mesa y que la tarea se entregue más rápido”.
Según parece, entre más detalles específicos, más atención y compromiso demostrarás, o bien, una impresión duradera en el encargado de recursos humanos. Según Glassdoor, se debe “juguetear” con una respuesta no solicitada intrépida, pero tampoco caer en lugares comunes, ya que frases como “realmente quiero este trabajo” demostrará a un aspirante a empleo desesperado y poco competente.