Hoy vamos a platicar sobre los vinos fortificados o como se les conoce también vinos generosos o vinos encabezados.
Me gustaría empezar por definir o explicar la característica principal de este tipo de vinos y esto es que a estos vinos se les agrega alcohol vínico en alguna parte de su proceso de fermentación, lo cual deriva una mayor graduación alcohólica y en general son más cálidos que los vinos tradicionales.
Los vinos fortificados se elaboraron por primera vez en el siglo XVI y esto fue por una necesidad de la época. En esa época el comercio del vino se realizaba principalmente por barco y se movía entre países, lo cual siempre requería tiempo en el traslado.
Al principio cuando se hacían estos envíos, los comerciantes se daban cuenta que el vino se arruinaba por el tiempo y variaciones de temperatura que sufrían durante el traslado, así que como solución se les ocurrió el agregarle alcohol vínico y se dieron cuenta que haciendo esto el vino llegaba bien a su destino y así es como nacen este tipo de vinos fortificados.
Algunos ejemplos de vinos fortificados serian el brandy, los oportos, jerez, etc. Este tipo de productos varían mucho en el nivel de alcohol que tienen, así como en el nivel de dulzura que hay entre cada uno de ellos.
En cuanto al momento en el que se agrega el alcohol vínico puede variar de las preferencias del productor, pero se puede hacer antes, durante o después de la fermentación del producto. En cuanto a la dulzura también se ha visto que entre más temprano se hace la adición de alcohol el vino fortificado va a ser más dulce.
Espero que esta información les sea de utilidad y lo invito a que prueben estos distintos tipos de vinos fortificados y los invito a mandarme comentarios en mis redes.