• Diversos sectores y expertos, aseguran que sería incorrecto eliminar completamente el outsourcing.

• Se supone que el outsourcing sirve para prestar servicios especiales y específicos.

• La tercerización bien utilizada, disminuye costos en reclutamiento y capacitación.

Desde hace tiempo, el outsourcing se convirtió en un tema polémico en México. Desde que llegó con la reforma laboral en 2012, se ha convertido en uno de los formatos más temidos por muchos empleados, pues se presta a actividades irregulares como la imposibilidad de generar antigüedad, la mala o nula inscripción en el Seguro Social, o no pagar prestaciones de ley como aguinaldo o utilidades. Esta situación, llevó a que el presidente Andrés Manuel López Obrador declarara que planea hacer una reforma que podría hacer desaparecer esta modalidad, también conocida como tercerización de personal. Pero, a ocho años de su llegada, ¿qué pasaría si en realidad se eliminara por completo?

Aunque los actos de corrupción no lo han hecho así, las personas subcontratadas tienen exactamente los mismos derechos que el resto de los trabajadores. Se debe poder generar antigüedad, tener seguro social, pagar aguinaldo, Afore, Infonavit y hasta vacaciones con prima vacacional. La subcontratación o outsourcing, es un medio por el cual una empresa contrata a un empleado a través de otra empresa. Esto puede representar un 50% de reducción de costos y ayudar en tareas específicas. Según TallentiaMX, existen 7 millones de personas contratadas de esta forma en México. Un 36.7% pertenece a pequeñas y medianas empresas, por lo que se dice que uno de sus principales beneficios es apoyar en este sector.

Regular, no eliminar

Diversos sectores y expertos, aseguran que sería incorrecto eliminar completamente el outsourcing, lo más correcto sería regularlo, para evitar prácticas ilegales y afectación a los derechos laborales. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) publicó un comunicado al respecto recientemente: “si la subcontratación laboral es empleada de forma correcta, conforme a las leyes, pagando las obligaciones sociales de los trabajadores -tal y como corresponde-, así como las obligaciones fiscales debidas, esta figura utilizada y reconocida en todo el mundo, apoya también al fomento del empleo, a la economía formal y a la inversión”.

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¿Empleos en peligro?

Si desapareciera el outsourcing “se perderían una cantidad muy importante de empleos legítimos debidamente remunerados, que impulsan nuestra recuperación económica”, señaló Coparmex en su comunicado. Algunos expertos consideran que suprimirla traería problemas económicos. Según se dice, se podrían perder varios millones de empleos. Algunas de las áreas que más se benefician de la subcontratación son la informática, los recursos humanos, contabilidad, soporte técnico, entre otras. Para explicar este beneficio, se puede ejemplificar con la idea de un centro de atención telefónica, el cual se puede contratar por medio de otra empresa, con personas que no importa que se encuentren en otros países, ahorrando el costo de tener un propio departamento para este propósito.

Servicios especiales

Se supone que el outsourcing sirve para prestar servicios especiales y específicos y ahí es donde se encuentra su principal ventaja. La subcontratación no puede ser para actividades esenciales de una empresa, sino como una ayuda adicional, asesoría o especialización requerida. De esta manera, las empresas se pueden enfocar en su especialidad, dejando que otras sean las que se encarguen de áreas adicionales que les ahorren trabajo y costos.

Principales ventajas

El outsourcing serviría para que una empresa concentre sus recursos en desarrollarse en su área específica. Las tareas más rutinarias se pueden llevar a cabo por medio de una tercerización, disminuyendo costos en reclutamiento y capacitación. Esto les permitiría ofrecer servicios y productos de mayor calidad, pues están más enfocados a ello, con los empleados que sí tienen contratados en formato convencional.