DespuĂ©s de pagar 44 mil millones de dĂłlares por Twitter, Elon Musk —propietario de Tesla y SpaceX— decidiĂł despedir a gran parte del personal y de manera subsecuente involucrarse en un escándalo polĂtico. Para continuar el drama, dos dĂas antes de las elecciones de medio tĂ©rmino, instĂł a los “votantes de mente independiente” a votar por los republicanos. Un acto claramente polĂtico y proselitista que sus antecesores habĂan evitado.
“A los votantes independientes: el poder compartido frena los peores excesos de ambos partidos, por lo que recomiendo votar por un Congreso republicano, dado que la presidencia es demĂłcrata”, escribiĂł Musk en Twitter. El tweet obtuvo más de 90 mil retweets y más de 500 mil me gusta despuĂ©s de su publicaciĂłn.Â
No es la primera vez que Musk ha utilizado Twitter a su favor, desde sus inicios en Tesla logrĂł —a travĂ©s de sus mensajes— incidir en la percepciĂłn de la marca y Ăşltimamente en el valor accionario de la compañĂa. El acaudalado y famoso CEO de Tesla asustĂł a DemĂłcratas que temen que la herramienta sea utilizada para promover fake news o una agenda intervencionista en el discurso polĂtico mundial.
Twitter arma polĂtica
Para Musk “Los demĂłcratas o republicanos incondicionales nunca votan por el otro lado, ¡asĂ que los votantes independientes son los que realmente deciden quiĂ©n está a cargo!”. Los efectos del tweet no fueron determinantes en la elecciĂłn, la temida “ola roja” republicana no llegĂł, pero fue suficiente para alterar el balance en el Congreso y Senado Norteamericano. Â
El uso de redes sociales con fines polĂticos no es un asunto nuevo, mucho menos algo que sorprenda a paĂses en vĂas de desarrollo como MĂ©xico. No obstante, es la primera vez que el director ejecutivo de una de estas plataformas indica una preferencia de una forma u otra. Aunque de manera totalmente objetiva, Musk buscĂł el balance más que favorecer a un partido. Para algunos grupos progresistas la medida causĂł alertas, un multimillonario que tiene tanto poder y hace un comentario en redes sociales en el Ăşltimo momento de una elecciĂłn altamente polĂ©mica es un gran problema. El uso de los medios para favorecer una corriente polĂtica tampoco deberĂa sorprender, especialmente en la UniĂłn Americana, Fox News de Rupert Murdoch ha sido siempre un aliado del partido Republicano. En contraste, los comentaristas y comediantes de la barra Late Night como Colbert y Meyers son marcadamente DemĂłcratas. Â
Los tweets no tienen mayor peso en los resultados de las elecciones pero logran un objetivo mayor, regresar a Twitter a la relevancia polĂtica nacional. En MĂ©xico la plataforma ha caĂdo lentamente en la ignominia, pero la llegada de Musk podrĂa insertar un nuevo sentido de importancia. “Benditas redes sociales” dirĂan por allĂ. Para paĂses latinoamericanos, un Twitter sin control es una mala noticia. No se trata de una red social, en realidad es un medio de comunicaciĂłn en toda la definiciĂłn de la palabra. La falta de moderaciĂłn o el sesgo hacia algunas ideas polĂticas convertirĂa a esta plataforma en una caja de resonancia de ideas radicales. Para el marketing polĂtico representarĂa el uso como armamento de los mensajes.Â
No es necesario el engaño, Twitter siempre ha sido un espacio imperfecto y de poca tolerancia. Pero, al menos era parejo para todos, Musk en un intento por crear una plataforma con mayor libertad de expresiĂłn podrĂa terminar por favorecer el extremismo. Con la salida de Donald Trump el medio perdĂa terreno en la conversaciĂłn pĂşblica. Para Musk la controversia parecĂa ser el objetivo y mira que lo logrĂł. “Como la mayorĂa de la gente en Estados Unidos, estoy de acuerdo con algunas de las polĂticas demĂłcratas y republicanas, pero no con todas”, “Sin embargo, si los poderes ejecutivo y legislativo están dominados por *un* partido, entonces perdemos el equilibrio de poder”.
Elon Musk y la polĂtica
El multimillonario de la tecnologĂa se ha enfrentado a la polĂtica en el pasado, particularmente cuando prometiĂł en mayo permitir que el expresidente Donald Trump volviera al sitio cuando asumiera el cargo, una medida que le valiĂł el apoyo de los conservadores que ven a Musk como un salvador de la libertad de expresiĂłn. Desde que tomĂł el liderazgo en la red social, Musk dijo que pasarĂan “al menos unas pocas semanas más” antes de que se permitiera que las cuentas prohibidas volvieran a Twitter, ya que la compañĂa elabora nuevas polĂticas de “integridad electoral”.
La venta de Twitter es la primera de una red social masiva, pero no la Ăşltima. Debemos considerar quĂ© pasarĂa si Disney compra Facebook o Walmart a Pinterest. Son ideas que parecen distantes pero demuestran que la idea de medios independientes llevados por una pseudo juventud de Silicon Valley es una falacia. Zuckerberg tiene 38 años, tal vez en unos 10 más decida que es mejor retirarse y vender. Hablamos de empresas que representan un poder mediático importante, no hay razĂłn por la cual no puedan ser absorbidas por intereses corporativos. El futuro del marketing en redes sociales está en juego, asĂ de simple.