En días pasados Disney sorprendió a sus seguidores al anunciar a Halle Bailey como la actriz escogida para interpretar a “La Sirenita” (película clásica de las princesas de Disney) en live action, es decir, llevar los dibujos animados a una película con personajes de la vida real.

Esta decisión ha causado gran controversia en los medios debido a que el propio Disney ha roto el estereotipo que se creó del personaje animado desde 1989: una joven sirena caucásica de ojos azules y pelirroja, cambiándola por una chica afroamericana de ojos y cabello obscuro.

En esta ocasión, la compañía más grande de entretenimiento y comunicación ha apostado por el racebending (neologismo utilizado para describir el cambio de la raza o etnia percibida de un personaje durante la adaptación de una obra de un medio a otro), generando gran variedad de posturas: desde el ser una estrategia de mercadotecnia para abarcar nuevos mercados hasta que no se ha respetado la esencia del material original.

Pero ¿qué implica este cambio en cuanto a la imagen y branding personal? Principalmente el color. Un estudio realizado por la empresa Helpout, revela que “la percepción del color está influenciada en gran medida por factores como nuestras experiencias personales, educación cultural y preferencias personales, afectando nuestra percepción del carácter y la personalidad de un individuo, producto o marca”.

Disney se caracteriza por pensar en cada detalle de sus personajes y películas, y entre los principales es la psicología del color, como lo revela la siguiente infografía creada por Venngage, quienes realizaron un estudio sobre las características de 44 héroes y villanos de Disney, en el cual Ariel predomina el verde, asociado con el crecimiento, curación y seguridad, ya que ¨deja una vida cómoda para aprender a caminar por sí misma y tener la vida que quiere”.

En cuanto a mi visión como Consultora en Imagen, existe la herramienta del “análisis del color” para determinar cuál es la colorimetría de una persona y conocer aquellos colores que más le favorecen, tomando en cuenta las características de los ojos, piel y cabello.

Para La Sirenita que todos concebimos de ojos azules, piel clara y cabello rojizo, se determina que es una Primavera, ya que los colores que más le favorecen son los cálidos y claros.

En la nueva versión, al cambiar completamente sus características físicas, se le denomina Invierno, en el cual los colores que más favorecen al personaje son los fríos que tienen una base en azules, rosas o violetas en tonos obscuros. Todo ello aplicado al maquillaje, vestuario, accesorios, incluso en la escenografía para lograr resaltar sus mejores cualidades físicas.

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Si Disney se atrevió a cambiar, ¿por qué tú no?