Santiago, Chile.- Varias veces a la semana me toca escuchar historias sobre Tinder. Colaboradores, amigos y hasta mi hija mayor pondera las “bondades” de la aplicación para flirtear en línea y “conocer gente entretenida”. Si hablamos de entretención, en la red podemos encontrar una serie de testimonios curiosos que nos hacen preguntar ¿Qué hay de bueno en Tinder?
Las mujeres somos románticas y muchas esperan encontrar al hombre de su vida en aplicaciones como esta. Error. Basta con mirar el catálogo de un “tindero” para comprender que la plataforma no pretende nada más que una aventura.
Traduzco: “Metas de esta guía. 1 Conseguir la atención y atracción de chicas bonitas. 2. Conseguir su número lo antes posible. 3. Tener sexo con ella/s durante las primeras 24 horas. Idealmente, durante las 2 primeras horas de Tinder. 3. No conseguir una cita, no textear a la chica eternamente y esperar que te escoja y, ciertamente, no tener múltiples citas con ella”. Luego entrega ciertos tips con respecto a cómo elegir la mejor foto para atraer.
En el otro lado, me encuentro con un artículo escrito por Lyndsay Rush, donde asegura que aprendió muchas cosas utilizando la aplicación. Aquí van algunas de ellas.
La dificultad de contactarse realmente con un extraño. No existe en verdad una forma suave de iniciar una conversación con alguien que lo único en común que tiene contigo es que no es feo.
Fotos. Si la foto de perfil en Tinder enmarca a dos chicos, el que te toque siempre será el menos atractivo.
Primera impresión. Nunca tienes una segunda oportunidad, tras la primera impresión.
Selfies. Nunca confíes en un hombre que puede tomarse una selfie mejor que tú, nunca.
Más sobre imágenes. Aprovecha la oportunidad de borrar las fotos de perfil donde apareces con tus ex. No hay nada más confuso para los demás que verte abrazada a alguien. Lo mismo sucede con tus intereses en Facebook. Borra cualquier cosa que pueda ser comprometedora.
Ser atractiva. Tener amigos atractivos te hace parecer más atractiva.
Entonces, cuando todo se refiere a la forma (“me gusta”, “no me gusta”, el mercado del sexo y la belleza) y nada al fondo, sigo preguntándome ¿Qué hay de bueno en Tinder?
