Entre los cambios que trae consigo la tecnología en la vida de los usuarios, uno de los que se verán en mayor medida en pocos años es la variación en la necesidad de los empleos relacionados con este sector, así como aquellos que dejarán de ser necesarios al ser sustituidos por ‘dispositivos y aplicaciones”.
Y es que aunque no se trate de una sustitución de humanos por robots al estilo de las películas, de forma innegable los cambios se darán y ya se han comenzado a experimentar, a pesar de que los economistas y analistas no tienen un panorama 100 por ciento claro. Aunque lo que si se ha observado es que los cambios ya comienzan y muestran ciertas tendencias.
Inminente o no, es una realidad que afectará a muchos, de hecho según la consultora Bruegel, a la larga las nuevas tecnologías afectará a áreas clásicas del empleo, como ha sucedido históricamente cuando comenzaron los procesos de industrialización.
Bruegel señala que la ‘computarización’ vendría a ser un proceso de automatización potencial que se dé en cierto tiempo, que podría ir de una a dos décadas.
y es que los avances tecnológicos amenazan las tareas para las que se requieren habilidades de baja preparación en las empresas y fábricas, siendo especialmente vulnerables, por ejemplo, las tareas de producción y ensamblaje del sector automotriz, como parte de los trabajos que requieren poca preparación o estudio.
Un ejemplo de cómo ha afectado hasta el momento estos avances tecnológicos a diferentes profesiones es la gráfica que se coloca a continuación, elaborada por Statista y the Independent, donde se contabilizan el tipo y cantidad de empleos que se han perdido en Londres desde 2001 a raíz de la automatización de diferentes procesos. ¿Los más afectados hasta ahora? Los trabajos secretariales y de biblioteca.