• Para evitar cualquier ilegalidad, resulta conveniente para una PyME saber las diferencias entre cómo funciona una empresa pública y una privada.

• Las pequeñas y medianas empresas generan 72 por ciento del empleo en México.

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Para los emprendedores, comenzar un negocio siempre será una obra emocionante. Sin embargo, como en todo movimiento novedoso, es vital que los fundadores aborden el funcionamiento de sus negocios y analicen el panorama de lo que harán de manera acertada para evitar contratiempos.

El simple hecho de conocer la diferencia entre saber qué tipo de empresa será, pública o privada, puede significar el hecho de respetar o violar la ley. Esto comienza con el tipo de empresa que se desea poner en marcha: pública o privada. En este punto, el hecho de requerir un sitio web “de moda” o no, puede resultar intranscendental. Lo important es la manera de dirigir una empresa.

Si se hace mal, puede haber consecuencias graves si elige una opción y al final se decide no manejar su negocio de la manera prescrita. Para evitar cualquier ilegalidad, resulta conveniente saber las diferencias entre las empresas públicas y privadas antes de tomar una decisión.

Hoy, el caso de Tesla, Elon Musk y su plan de privatizar a su compañía es muy conocido. Él quería liberar a la compañía de la “presión” que le imponía Wall Street por los resultados a corto plazo. Finalmente, decidió mantenerse pública, pues volverse privada sería más difícil de lo que creía originalmente.

Ahora tiene que pagar multas y lidiar con una situación aún mayor: buscar su reputación perdida. De esta manera, es ideal saber cómo se deben conducir.

Las micro, pequeñas y medianas empresas generan 72 por ciento del empleo en México, aportan 52 por ciento del PIB y, pese a eso; pocas sobreviven pocas sobreviven por más de cinco años.

Entonces, concentrar actividades como el comercio o servicios en trabajos independientes requiere de tomar en cuenta el aspecto de cómo funcionará.

A una empresa privada se le permite poseer o tener control sobre la mayoría de las acciones. No existe un “mercado” para estas acciones, lo que significa que no están disponibles para ser compradas por personas públicas. No están tan obligadas a prácticas regulatorias como las empresas públicas.

¿Cómo se ve una empresa pública?

Tienen la oportunidad de lanzar sus acciones al público, lo que les permite acceder a formas de capital más amplias en lugar de mantenerse privadas.

Sin embargo, hacer esto significa que las empresas enfrentarán reglas operacionales más estrictas y un mayor escrutinio, menos privacidad (en términos de cómo se maneja su negocio).