A poco más de 40 días para que se celebren las elecciones presidenciales en nuestro país, las campañas de marketing político se han convertido en tema de conversación a diario. Los recursos que utilizan los candidatos así como sus equipos estratégicos para influir en el voto son diversos, y en el afán por ganar relevancia, se pueden caer en errores que debilitan la credibilidad del discurso. Un ejemplo claro fue lo sucedido con Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición Por México al Frente.
Durante el primer debate presidencial celebrado en la Ciudad de México el mes pasado, Anaya defendió su postura a los cuestionamientos sobre las acciones que tomaría para contrarrestar la violencia en el país mostrando un libro en el que, a decir del abanderado, se encontraban sus propuestas en la materia.
La existencia del supuesto material literario que fuera de la autoría del ex presidente del PAN fue reconocida una vez más por el coordinador estratégico de campaña de Ricardo Anaya, Jorge Castañeda, quien en una emisión televisiva afirmó un día después del debate lo siguiente: “Ayer Ricardo Anaya presentó al principio la portada, y no es solo la portada, es un libro que salió ayer de la imprenta justamente, es un libro de 120 páginas con 158 propuestas muy concretas. Obviamente poca gente va a leer cada una de ellas, pero ahí está el libro y a partir de hoy va a estar online, arriba, y lo puede bajar quien quiera bajarlo, obviamente libre de costo”.
Lo cierto es que luego de tres semanas de este hecho y a unos días de que se celebre el segundo debate presidencial, aún no se tiene rastro de ducha publicación, condición que se comparte con los 40 puntos y las 158 propuestas mencionadas por el candidato.
En el primer #DebateINE, Ricardo Anaya mostró un libro con su programa de gobierno, llamado “De frente al futuro”. Supuestamente contiene 40 puntos y 158 propuestas, pero nadie lo ha visto y no tiene fecha de publicación https://t.co/lyhC0z0TFn
— #Verificado2018 (@VerificadoMX) 17 de mayo de 2018
El hecho ha sido confirmado por la iniciativa #Verificando2018 que mediante un tweet ha hecho referencia a este tema. La publicación está acompañada por un artículo en el que se refiere una investigación firmada por Animal Político, misma que encontró que los miembros de comunicación de la campaña, desconocen el mencionado documento.
“Salomón Chertorivski, encargado de programa de gobierno y propuesta, explicó en entrevista que ese libro contiene el trabajo que él ha redactado para la campaña de Anaya, pero que todavía es una versión preliminar. (…) Según Chertorivski, ninguna editorial publicará el libro, pues solo se mandó a una imprenta para sacarlo como un material de la campaña. La vocería de campaña de Anaya confirmó que el libro todavía no se puede consultar y tampoco hay fecha tentativa de publicación”, dicta el artículo compartido.
Aunque si se otorga el beneficio de la duda, el hecho puede responder a un error logístico o bien a un simple mal entendido, la realidad es que el hecho podría considerarse como publicidad engañosa dentro del proceso electoral, situación que agrava uno de los desafíos más importantes para las estrategias de marketing político: la desconfianza de los electores.
Estos candidatos, entre no me acuerdo del nombre del libro y yo solo escribí el título, el futuro se vislumbre muy negro!!!
— Felipao SRayon (@SRayonBus) 18 de mayo de 2018
Ps igual y eran hojas blancas empastadas ??♀️ conociéndolo
— Alebrije Político (@AlebrijPolitico) 17 de mayo de 2018
— ALFONSO NAVA CHAVEZ (@alfondiabolo) 18 de mayo de 2018
Un estudio publicado por Consulta Mitosfky a principios de esta año indicaba que los partidos políticos se ubican como las instituciones que menor confianza inspiran entre los mexicanos. Estas organizaciones sostuvieron un puntaje de 4.4 en una escala de 0 a 10.
El dato coincide con las proyecciones entregadas por el Latinobarómetro 2017, las cuales destacan que la confianza de los mexicanos hacia los partidos políticos está en su peor nivel en los últimos 22 años, debido a que sólo el 9 por ciento de los ciudadanos confían en ellos.
incurrir en este tipo de situaciones no hace otra cosa que acrecentar el clima de incertidumbre y desconfianza, lo cual supone un problema grave en tiempos de elección popular.