Frida Kahlo es otra de esas marcas que han encontrado en el licensing una oportunidad de extenderse en segmentos como el de libros, zapatos de la marca Converse, ropa de Zara, hospitalidad, tequila, marcas como Aeroméxico, estampas, relojes, muñecas, cuadernos de Scribe, Google, música, productos de cuidado de la piel, cerveza Bohemia, en el billete de 500 pesos de México y merchandising como mousepads y llaveros.
De ahí que pareció bastante lógico el anuncio de Mattel, de lanzar la iniciativa “Sheroes”, con la que la marca de juguetes Barbie lanzará al mercado una línea de muñecas que tiene por objetivo rendir homenaje a diversas personalidades femeninas actuales así como históricas. Una de ellas es Frida Kahlo.
Sin embargo, esto desató una serie de problemas para la marca. Primero, Mara Romre, sobrina nieta de Frida Kahlo, explicó que Mattel no cuenta con autorización para usar imagen de Frida Kahlo, respaldada por su familia.
Ante esto, Mattel indicó que cuenta con el permiso correspondiente para honrar “el gran legado e historia de Frida Kahlo” a través de una muñeca Barbie.
Pero ahora, un juez mexicano prohibió la venta de dicha muñeca en México, al reconocer como única propietaria de los derechos de imagen de la célebre pintora a su familia, informó el jueves el abogado de las descendientes.
El juez dijo que la compañía “Frida Kahlo Corporation”, sus accionistas, licenciatarias y subsidarias, deberán abstenerse de utilizar la marca, imagen y la obra de la ilustre pintora Frida Kahlo como presentación en sus negocios y establecimientos mercantiles, sin autorización de la familia.
“Estoy encantada porque creo que la justicia se está llevando a cabo (…) quienes tenemos los derechos para todas estas cosas somos nosotros, la familia Kahlo”, dijo a la AFP Mara Romeo Pinedo, sobrina nieta de la pintora, en una habitación de su casa llena de cartas y fotografías de la creadora.
La Barbie inspirada en Frida sería lanzada al mercado este viernes, pero habrá que esperar lo que ocurra con el caso que apenas comienza, ya que Mattel podría apelar.