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Las marcas cerveceras viven su mejor momento en México o al menos dos grandes marcas tienen qué celebrar y esto es gracias a la creatividad.
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Tecate ya acostumbró a su consumidor a narrativas protagonizadas por grandes estrellas del cine de acción y después de Silvestre Stallone, el hueco a llenar es enorme.
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El efecto halo no es otro que el definido por Phillip Kotler como esta asociación que hacen las marcas con grandes personalidades para aprovechar sus valores.
Las marcas cerveceras viven su mejor momento en México o al menos dos grandes marcas tienen qué celebrar y esto es gracias a la creatividad con que empresas como Tecate han presentado a su nuevo embajador de marca.
El nivel en consumo que ha alcanzado México le ha permitido a las marcas de este país traer a embajadores de marca quienes se han convertido en un interesante referente en el mercado, para absolutamente todos los mensajes que se desempeñan de manera acertada ante el consumidor.
Con estos elementos sobre la mesa, lo que no podemos perder de vista hoy en día es la capacidad con que las marcas logran construir narrativas publicitarias de peso.
De las películas de acción, a accionar una cerveza
Tecate ya acostumbró a su consumidor a narrativas protagonizadas por grandes estrellas del cine de acción y después de Silvestre Stallone, la vacante quedaba muy grande para poder ser llenada por una celebridad del mismo calibre.
Debido a esto, ahora tenemos a Bruce Willis protagonizando una pieza creativa para Tecate y su llegada al mercado mexicano no tiene desperdicio, por el contrario, nos recuerda el papel que juegan hoy en día estrategias como el efecto halo.
“Para nosotros era fundamental encontrar un personaje que encarnara ese espíritu protector que nos ayudara a transmitir el mensaje con la seriedad, el profesionalismo y el buen sentido del humor que caracteriza a la marca. Así llegamos a Bruce Willis, un actor con gran trayectoria en la industria cinematográfica, quien con toda certeza comparte los valores que queremos comunicar”, revela Lino Villarreal, director de Heineken México, al hablar sobre el secreto de su estrategia de efecto halo.
El efecto halo no es otro que el definido por Phillip Kotler como esta asociación que hacen las marcas con grandes personalidades para aprovechar sus valores con que son reconocidos por las audiencias, para poder llegar a nuevos consumidores y fidelizar con éxito a su actual segmento de clientes.
Esta estrategia no e snueva, lo que si es novedoso es la celebridad que cada marca ficha para lograr sorprender al consumidor y cada una de ellas lo hace evidentemente, a tono de la narrativa que en ese momento buscan impulsar en sus productos.
Una marca que ha hecho esta estrategia de manera excepcional y ha encontrado en una vieja narrativa su mayor promoción en la actualidad ha sido Nespresso, que es el ejemplo que en todas las carreras de mercadotecnia siempre se ofrece, ya que la colaboración que han hecho con George Clooney ha sido una de las pautas más importantes en el mercado.
Dicho esto, no cabe duda que en el mercado se han establecido tendencias muy importantes y lo que es muy importante de conocer, acciones que al día de hoy no nos decepcionan, por el contrario, ayudan a que grandes compañías como Bimbo encanten con un Leo Messi sorprendiendo en el punto de venta por ser imagen de este pan empaquetado o descubriendo que Ryan Reynolds es la estrella detrás de la campaña de Sabritas.
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