No es un secreto que durante este periodo de crisis, uno de los sectores que se vio beneficiado fue el del entretenimiento en streaming. Basta con ver las cifras que giraron alrededor de importantes representantes como Netflix.
Para entender las potenciales oportunidades, basta con reconocer que durante el año pasado, el mercado de streaming a nivel mundial generó ingresos estimados en más de 29 mil 740 millones de dólares, según estimaciones de Video Advertising Bureau, comScore y Nielsen.
Si esta cifra resulta interesante, más relevante es reconocer que los ingresos para el sector podrían ser mayores a 43 mil 600 millones de dólares hacia 2027.
Aterrizando los datos al mercado mexicano, tenemos que a decir de estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), hasta 2018, se contabilizaban 74.3 millones de internautas, de los cuales 8.3 millones eran identificados como suscriptores de plataformas de streaming.
El sol no brilló para todos
En medio de este escenario y apresar de la alta demanda que dichas plataformas registraron sobre todo en el periodo de confinamiento, la realidad es que la oportunidad no fue capitalizada de la misma manera por todos los competidores en el mercado.
De hecho, la tarde de este miércoles se dio a conocer que un reciente jugador en este terreno pereció en medio de la pandemia.
Hablamos de Quibi, la plataforma de video en streaming que con un fuerte enfoque en dispositivos móviles, cerrará su servicio de manera definitiva luego de apenas seis meses de operaciones.
El reporte fue dado a conocer por The Wall Street Journal medio que recuerda esta propuesta fue capaz de lebatar más de mil 750 millones de dólares en inversión privada, pero ni siquiera esta bada despreciable cantidad fue escudo ante el mal que ahora mismo afecta todos los negocios: la pandemia.
El encierro: su peor enemigo
A diferencia de lo que sucedió con plataforma como Netflix o Disney Plus, los largos periodos de confinamiento fue el factor que jugó en contra de este servicio, mismo que dependía de los dispositivos móviles y el contenido original.
Aunque el fundador de este servicio, a decir de Lafuente citada, se puso e contacto con gigantes de la talla de Facebook, Apple y WarnerMedia para lograr una posible compra, la realidad es que ninguno demostró interés en adquirirla ni en realizar una asociación para aprovechar las series que habían producido.
DE la gloria al fracaso en 6 meses
Para muchos la propuesta de Quibi en el terreno del streaming fue una burbuja desde el comienzo. En la primera semana de lanzamiento, el servicio registró 1,7 millones de descargas en iOS y Android, una cifra que llamó la atención de los analistas.
Lo cierto es que la bomba explotó luego de que terminó el periodo de prueba gratuito por tres meses.
Con precios que iban desde 4,99 dólares mensuales (con anuncios) hasta 7,99 dólares al mes (sin anuncios) pocas fueron las personas que decidieron mantenerse como suscriptores.
Datos compartidos por la propia Quibi, indicaron que 90 por ciento de sus usuarios abandonaron el servicio al terminar el periodo de prueba.
Esto quiere decir que de 910 mil suscriptores al servicio de streaming registrados en abril, solo 72 mil decidieron la suscripción.
Lo que queda claro es que competir contra Netflix, Disney Plus o HBO no es tarea sencilla en tiempos de pandemia. Los que queda por ver es cómo se ajustará este mercado que parece estar repetido entre los grandes en medio de la nueva normalidad.