Internacional.- Este martes se reanudará la actividad de la UEFA Champions League con los juegos Real Madrid-Schalke 04 y Porto-Basel, tras los cuales conoceremos a los dos primeros equipos calificados para la ronda de cuartos de final. Si bien el partido entre lusitanos y helvéticos se presenta como uno de los menos atractivo de la ronda, también cuenta con elementos de marketing que vale la pena analizar, especialmente el extraño triángulo Nike-Warrior-New Balance que existe dentro del Porto.

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A mediados de la temporada pasada el conjunto portugués decidió dar por finalizada su relación de más de una década de existencia con Nike, para dar paso a la emergente Warrior, quien hasta el año pasado lucía como una potencia en crecimiento dentro del mercado europeo, esto hasta que su compañía matriz New Balance decidió involucrarse dentro del balompié, tomando posesión (a partir de la próxima temporada) de los acuerdos firmados por su subsidiaria en el Viejo Continente.

De tal forma, ya sea por la incertidumbre causada por el constante cambio de sponsor técnico o la longeva relación con Nike, actualmente es imposible encontrar un solo jugador del conjunto lusitano que calce las zapatillas de su actual sponsor técnico o su compañía matriz, siendo la empresa de Oregon la que mantiene el dominio dentro del vestidor de los dragones.

Así, 19 de los 26 jugadores que el Porto tiene registrados para la actual temporada (en todas las competencias) continúan utilizando los zapatos de su anterior sponsor técnico, siendo el modelo Mercurial Superfly el más socorrido por sus futbolistas.

Sea como sea, la actual situación que atraviesa el Porto (al igual que el resto de los equipos patrocinados por Warrior) deja en claro que “a río revuelto, ganancia de pescadores”.