En Estados Unidos el sector bancario vive un momento de revolución luego de que se redujeron sus redes de sucursales en alrededor de 2 por ciento durante 2018 y con una continuación durante el año en curso.
Desde Bloomberg se refiere que las instituciones bancarias están gastando elevados recursos en sus esfuerzos digitales a medida que evolucionan los hábitos de los consumidores; además de que también ha sido una vía importante para la gestión de costos.
Información de USBankLocations.com sostiene que a finales de 2017 cuatro grupos financieros tenían una base de empleados superior a los 100 mil trabajadores, Bank of America (142 mil 412), Citibank (169 mil 042), JPMorgan Chase Bank (191 mil 929) y Wells Fargo Bank (232 mil 321).
En total, indica el medio, que hubo 87 mil 692 sucursales en lo que va del año, un 2 por ciento menos a los 89 mil 464 del año anterior. La red de sucursales se contrajo un 3.3 por ciento, mientras que, para las 25 empresas más grandes, se trató de un descenso del 3.1 por ciento.
En el caso de JPMorgan Chase, contaba con 5 mil 036 sucursales al 31 de diciembre, casi un 2 por ciento menos que el año anterior; a su vez Bank of America tenía 4 mil 341 sucursales a fines de 2018, frente a las 4 mil 470 del año anterior, de acuerdo con datos de FactSet, una disminución de casi el 3 por ciento.
A pesar de que esta tendencia poco a poco se incrementa, no se espera que las sucursales bancarias vayan a desaparecer.
Y es que se dio a conocer entre 2016 y 2018 se abrieron cerca de 2 mil sucursales en los Estados Unidos, no obstante se refleja la modernización necesaria para acomodar la continua ‘digitalización’ de las actividades de las sucursales.
De tal modo que se en lo que respecta al futuro, tanto inversores como clientes están a la espera de una mayor fusión de las sucursales y ofertas digitales.