Las compañías más importantes del mundo, de diversas industrias, señalaron que cuentan con chatbots y bot que sustituyeron desde hace tiempo áreas de trabajo que antes ocupaban humanos, secciones que no requerían creatividad o aportación de ideas, como atención al cliente, manejo de datos internos, entre otros.
De acuerdo con Gartner, la inteligencia artificial, sistemas de automatización, bots o chatbots ocuparán más de 5.1 millones de puestos de trabajo para 2020, lo que significa una reducción de trabajadores humanos, por lo que analistas están comenzando a cuestionarse quién pagará impuestos ahora. Entre las compañías que han aceptado el uso de IA destaca: Pizza Hut, Airbnb, cadenas hoteleras, automotrices, entre otras.
Recientemente, el CEO de Microsoft, Bill Gates, planteó la misma problemática ¿quién pagará impuestos? Y aseguró que los países deberían tomar cartas en el asunto y sugirió que los robots paguen impuestos, como lo hacen los humanos para obtener seguridad social, impuesto sobre la renta, etc.
Ahora, la funcionaria y supervisora de San Francisco, Jane Kim, aseguró que analiza que la ciudad implemento dichos impuestos a la ciudad, junto a representantes de la comunidad tecnológica, academia y sindicatos, partiendo desde el punto de los impuestos de nómina que pierde San Francisco por la automatización.
Concretamente, San Francisco busca que las compañías que sustituyen a humanos por robots en empleos paguen impuestos y no las empresas fabricantes de robots. Entre los impuestos que buscan recuperar es el destinado a la educación, es decir, quiere que los robots paguen la universidad de los humanos. Para Jane, de lograr gravar el uso de robots, el gobierno de Estados Unidos jugaría un papel más grande en cuanto a la regulación.
Además, San Francisco es un santuario de empresas tecnológicas, por lo que implementar el impuesto al uso de robot por parte de empresas marcaría un precedente a nivel global, sobre la importancia de que los bots paguen impuestos.